El ministerio de Empleo suaviza los requisitos para beneficiarse del plan de ayudas a la formación o el empleo denominado Garantía Juvenil. A falta de mayor concreción, el ministerio ha anunciado que, siempre que se cumplan los requisitos generales, podrán beneficiarse del programa financiado con fondos europeos todos los jóvenes inscritos como demandantes de empleo, y no hará falta apuntarse en un registro aparte, como hasta ahora.

Empleo ha anunciado hoy la supresión del registro específico para la garantía juvenil después de la reunión del secretario de Estado de Empleo, Juan Pablo Riesgo, con las comunidades autónomas en el seno de la Conferencia sectorial de empleo. El ministerio tiene previsto reunirse esta tarde con empresarios y sindicatos a fin de acabar de perfilar un conjunto de medias “urgentes” para reformar el programa europeo dotado con 6.000 millones de euros – 1.800 de los cuales corresponden a España –, a la vista de los pobres resultados obtenidos en nuestro país.

Un 46% de los jóvenes parados

El paro juvenil afecta en España al 46,5% de los jóvenes entre 16 y 24 años. La Garantía Juvenil pretende atajar este problema, especialmente el de los jóvenes que no estudian ni trabajan, los llamados ‘ninis’. Por este motivo, el programa promete facilitar empleo, prácticas o formación a los jóvenes hasta 30 años en el plazo de tres meses desde que ingresaron en el desempleo o finalizaron sus estudios reglados.

La reforma del programa de garantía juvenil es una exigencia de agentes sociales y de las comunidades autónomas, las encargadas en España de ejecutar las políticas activas de empleo. Además la Comisión Europea evaluó en octubre el desarrollo del plan español. Y concluyó que la cobertura de la garantía juvenil apenas alcanza al 10,7% de los ‘ninis’ en España, frente al 41,9% de media europea.

Además, el informe de la comisaria europea de Empleo, Marianne Thyssen, destacó que tampoco se cumple el plazo de tres meses para ofrecer las ayudas desde que el joven finaliza estudios o cae en el paro. Y, lo peor, que un 62% de los jóvenes beneficiarios en España se quedaron sin empleo, prácticas o estudios apenas seis meses después.

Fuentes consultadas no limitan en la supresión del registro obligatorio los cambios en el sistema de garantía juvenil. Según estas fuentes, el ministerio plantea implantar un sistema de cheque formación entre los jóvenes beneficiarios de la garantía juvenil, de tal modo que sean ellos quienes tengan mayor margen a la hora de elegir a las entidades que les presten la formación que puede acogerse al sistema.