Puede que la recuperación del sector inmobiliario en el Viejo Continente esté en camino, pero, en caso de estarlo, no se trata de un camino de rosas. El sector se enfrenta a un escenario complicado: la escasez del crédito, las nuevas exigencias regulatorias (Basilea III entre otros) y las dudas sobre la deuda soberana lastran su recuperación, de acuerdo con el informe Tendencias del mercado inmobiliario en Europa 2011, de PwC y ULI, que recoge las opiniones de más de 600 expertos del sector.

Según los encuestados, la escasez en los créditos se mantendrá durante todo este año: los bancos están volviendo al mercado pero con apalancamientos más bajos. ¿La novedad? Una posible entrada de nuevos jugadores en el lado de la financiación al sector (básicamente, fondos de deuda y entidades aseguradoras que pueden encontrar en la deuda una mejor alternativa que la inversión directa en inmuebles).

El estudio explica que la industria vivirá una cierta mejora en las inversiones de capital, que procederán cada vez en mayor medida de inversores de Asia-Pacífico, institucionales y fondos de capital riesgo.

Madrid y Barcelona siguen en la parte baja del ranking de ciudades con mejores perspectivas de inversión, aunque mejoran ligeramente su posición. Munich lidera esta clasificación en la que aparecen otras ciudades germanas como Hamburgo, Berlín y Frankfurt. Otras que están en el listado son Estambul, Londres, París o Estocolmo. Los encuestados consideran que Londres o París seguirán manteniendo la demanda de inquilinos de calidad.