El Gobierno se ha topado hoy con una negativa en la primera sesión técnica de su nueva mesa para la calidad por el empleo. Los sindicatos que participan en dicha mesa, Comisiones Obreras y UGT, han rechazado tajantemente dar a los interinos una solución como la que propone el Gobierno, es decir, dotarles de una indemnización por despido – de la que ahora carecen – que se iría incrementando con el tiempo, conforme avanza su relación laboral con la Administración.

Además, la reunión de la mesa permite vislumbrar las dificultades que atraviesan las relaciones entre el Gobierno de Rajoy y las centrales sindicales. A pesar de que la ministra del ramo, Fátima Báñez, aseguró ayer en una comida con la prensa, que hoy la mesa hablaría sobre el asunto de los interinos; las centrales, a la salida de la reunión de hoy, negaron que la contratación haya sido un tema que se haya tratado en la reunión de hoy; un extremo este que fuentes del ministerio posteriormente se encargaron de desmentir.

Los ‘números dos’ de los sindicatos mayoritarios, Ramón Górriz, por CCOO, y Ramón Pino, por UGT, rechazaron hoy la propuesta de un contrato con indemnización creciente para los interinos y el resto de trabajadores temporales en España, un 26% del total.

Tras su primera reunión, a la que acudió, por parte del ministerio, el secretario de Estado de Empleo, Juan Pablo Riesgo, los representantes sindicales criticaron con dureza al Gobierno del que dijeron que solo está dispuesto a hablar de temas “menores”. Y lamentaron que el Ejecutivo se resista a revertir su propia reforma laboral, impulsada por Báñez en 2012, y en especial sus efectos sobre la negociación colectiva entre los empresarios y sindicatos. Según estos últimos la reforma ha desequilibrado las relaciones laborales.

La propuesta Báñez sobre interinos

Según adelantó ayer miércoles la ministra de Empleo, Fátima Báñez, el Gobierno pretende esperar a que se despejen dos cuestiones prejudiciales planteadas al Tribunal de Justicia Europeo (TJUE) desde España. Así se lo sugirieron desde la mesa de expertos encargada de buscar una solución al problema de los interinos destapado por Europa. Sin embargo, el Ejecutivo tantea ya un solución, según adelantó la ministra en una comida con periodistas.

En su intervención, la ministra defendió un contrato con indemnización creciente como solución a la situación de los interinos. Este contrato se basa en el pacto de investidura con Ciudadanos y se aplicaría al conjunto de los temporales. Prevé una indemnización creciente, empezando por 12 días al término del primer año de servicio; siguiendo con 16 días, a partir del segundo año; y con 20 días por año trabajado al término del tercer año de servicio, según detalló la propia ministra de Empleo.

De este modo la funcionaria interina del ministerio de Defensa, cuyo caso acabó en el Alto Tribunal europeo, habría cobrado 20 días por año trabajado al finalizar su relación laboral, ilustró Báñez.

Sin embargo, agregó, el Gobierno no está pensando en modificar la duración de los contratos de interinos; es decir, en fijar un número máximo de años para este tipo de relación laboral con la Administración.

“Esta es nuestra propuesta aunque estamos abiertos a debatir otro tipo de soluciones”, concluyó la ministra.

Parece sin embargo que su propuesta no ha gustado nada a los sindicatos que hoy negaron incluso que la cuestión de la contratación se hubiera puesto sobre la mesa este jueves en la primera reunión técnica de la mesa por la calidad en el empleo. Un extremo este que fuentes del ministerio se apresuraron a desmentir.