En su intervención en el 16 Congreso del PP de Madrid, Rajoy ha afirmado que no iba a «reprochar nada a nadie», «ni ahora ni en adelante», pero ha resaltado que el Parlamento de un «gran país» de la UE «no puede decir por mayoría que no quiere cumplir una sentencia de los tribunales europeos». Según ha subrayado, ése no es un «problema» del Gobierno sino de España.
«La mano del Gobierno sigue tendida»
Tras asegurar que no quería entrar en el fondo del asunto, aunque cree que «se las trae», ha afirmado que decir que España «no quiere cumplir las resoluciones de un tribunal europeo» supone romper las «reglas del juego», tanto «las reglas de juego europeas como las del sentido común». «Y eso afecta a muchas cosas, entre otras, al crédito, a la imagen y al prestigio de nuestro país«; ha aseverado.
Rajoy ha afirmado que la «mano» del Gobierno sigue «tendida» y hará «todos los esfuerzos que haya que hacer» –como «ya» ha «hecho» el ministro de Fomento, Iñigo de la Serna–, pero ha insistido en que no se le puede pedir al Ejecutivo que el mensaje que transmita a Europa sea que las resoluciones de los tribunales europeos no se cumplen. «Eso no es algo que corresponda al ser español ni a lo que es nuestro país en el conjunto de la UE», ha enfatizado.
Aviso Legal
Esta es la opinión de los internautas, no de diarioabierto.es
No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.
Su direcciónn de e-mail no será publicada ni usada con fines publicitarios.