La bolsa española ha logrado mejorar a lo largo del día en una sesión que ha comenzado con pérdidas del -1%.

Los inversores han optado por alejarse de la bolsa y apostar por activos más seguros como el oro o la deuda soberana. En España la prima de riesgo se ha relajado hasta los 128 puntos básicos y la rentabilidad del bono a diez años hasta el 1,69%.

El Ibex no ha sido el único en remontar a lo largo de la jornada, pero sí es cierto que ha sido el que menos ha caído al cierre. Finalmente ha podido conservar los 10.300 puntos tras recortar apenas un -0,06%. El DAX alemán ha bajado un -0,57% y ha perdido los 12.000 puntos; y el FTSE londinense ha cedido un -0,59%.

En el plano macroeconómico el único dato digno de destacar ha sido la encuesta IFO alemana. Ha superado estimaciones tanto en su vertiente de clima empresarial (112,3 puntos vs 111,1 estimados) como de expectativas (105,7 vs 104,3 estimado).

El mercado de materas primas sigue en entredicho y acumula otra sesión más de descensos en el precio del crudo, lo que ha hecho perder un -0,52% a Repsol y un -1,51% a Técnicas Reunidas. Pero aún le ha ido las acereras Arcelormittal (-4,66%) y Acerinox (-2,69%).

En la aerolínea IAG (-2,8% hoy) ha podio más el cambio de recomendación negativo de Merrill Lynch que la caída del petróleo y una operación a la vista en el sector: la alianza entre American Airlines y China Southern Airlines.

En el lado de las subidas se han situado compañías como Meliá (+2,12%), Iberdrola (+1,34%) y Grifols (+1,22%).

Las preocupaciones se han centrado principalmente al otro lado del Atlántico tras la negativa del Congreso norteamericano a aprobar la reforma sanitaria propuesta por el presidente Trump.

Con las bolsas de Europa y Asia teñidas de rojo, en Wall Street el Dow Jones prolonga las caídas que sufrió la semana pasada, que fue la peor para la bolsa americana desde el mes de septiembre. Las dudas se centran en sí Donald Trump será capaz de sacar adelante los planes de estímulo fiscal que ha estado descontando la bolsa. Esta incertidumbre no solo afecta al mercado de renta variable si no también al dólar, que cotiza en mínimos desde noviembre. El tipo de cambio eurodólar ya está cerca de rebasar el nivel de 1,09.