Buena subida en Wall Street, con máximos en el Nasdaq, pero la sensación que da es la encontrarse a medio camino entre el optimismo y los nervios.

Han subido todos los índices de referencia más de un 1% y el Nasdaq 100 y el Nasdaq Composite han concluido la jornada en máximos históricos de nuevo:

Sin embargo, la reacción del S&P 500 y del Dow Jones, los dos índices clave para la mayor parte de los inversores, se antoja un poco corta, especialmente en el desarrollo de la jornada. Lo vemos en este gráfico del S&P 500:

Poco cuerpo en la vela, mucho hueco en la apertura y cierre demasiado alejado de los máximos del día. Sí, ha cruzado al alza la directriz bajista de corto plazo, lo que es un alivio, pero no ha rematado.

Y es que al otro lado del charco tienen esta semana dos citas importantes y un evento que todo el mundo espera que no llegue a celebrarse. La primera cita es el dato preliminar del PIB del primer trimestre, muy esperado para ratificar o no la mejoría de la economía estadounidense. La segunda es la reforma fiscal, de la que el propio Trump aseguró que habría novedades el miércoles.

Por lo que se refiere al evento que nadie desea perio que puede llegar a eclipsar otras cuestiones de actualidad, si el viernes no hay acuerdo para desbloquear los presupuestos, habrá que proceder al cierre de la administración federal.

Lo peor es que no parece que las partes enfrentadas estén próximas a un acuerdo, especialmente la Casa Blanca y el teórico partido del presidente, los republicanos. Vuelven a estar a mamporro limpio por un quítame allá este muro. Para Trump, la financiación de su promesa electoral es algo prioritario, pese a quien pese y caiga quien caiga, pero entre los republicanos hay muchos que prefieren destinar el dinero público a otros menesteres.

No es un tira y afloja entre dos partidos. Es un nuevo punto de conflicto entre el presidente y los suyos. No se ponen de acuerdo ni para elegir la canción que cantar en la ducha. A nadie se le oculta que cerrar la administración sería un severo varapalo para Trump, pero a día de hoy ninguna de las dos partes ha cedido un milímetro desde sus posturas de partida. Salvo milagro de última hora, miles de funcionarios se irán a casa desde la semana que viene.

Lo extraño es que con esta losa sobre sus cabezas, los índices hayan avanzado y que incluso en el Nasdaq se estén marcando máximos históricos. Sí, lo de Francia aclara el panorama… a este lado del Atlántico. No en vano, muchos analistas americanos ya comienzan a aconsejar a sus clientes los mercados europeos en lugar del americano. Será por algo.

Al cierre, el Dow Jones avanzó un 1,05%, el S&P 500 un1,08 %, el Nasdaq 100 un 1,21%, el Nasdaq Composite un 1,24%, el Nyse Composite un 1,25% y el Russell 2000 un 1,31%.