Hemos vivido una típica jornada de más a menos, con buen hueco al alza en la apertura y una sesiòn que se ha dedicado todo el rato a volver a los orígenes.

Es el problema que se suele poner de manifiesto cuando en la víspera, tras el cierre, varias empresas importantes presentaron sus resultados. Varias tecnológicas encabezadas por Amazon están en ese caso y han puesto la pólvora para el primer cohete. Fue al comenzar la sesión, pero debió llover en Nueva York y se les mojó la pólvora.

No hay más que ver el gráfico del Nasdaq 100 para apreciar uno de esos máximos raros de toda rareza:

Un máximo con vela negra, negrísima. Es una de esas figuras feas, feas, feas y demasiado a menudo premonitorias de corrección.

Y lo peor es que ese gráfico que les muestro es del mejor índice de Wall Street en lo que va de año. Ha subido un 14,80% desde el cierre del año pasado. Veamos ahora el gráfico del que tradicionalmete suele ser el índice más ‘equiibrado’ en la Bolsa americana:

No solo no ha logrado hacer nuevos máximos en este tirón sino que está dibujando algo que puede ser un techo. Y para colmo, hoy deja una envolvente bajista… Menos mal que en la semana, en el mes y en el año los índices han ganado un buen dinerito porque de no ser así, esto nos llevaría a una nueva penalidad.

No ha podido aguantar el cañonazo de las cuentas presentadas anoche y en enseguida han comenzado a compensar las presentadas al inicio de la sesión hasta terminar por imponer su ley. Los resultados presentados esta tarde han sido peores que los presentados anoche y eso es con lo que parece que se ha quedado el mercado.

Al cierre, el Dow Jones perdió un 0,19%, el S&P 500 un 0,19%, el Nasdaq 100 sumó un 0,22%, el Nasdaq Composite se dejó un 0,02%, el Nyse Composite un 0,37% y el Russell 2000 un 1,18%.