La inflación sigue condicionando la firma del acuerdo salarial para 2017. Los sindicatos UGT y Comisiones Obreras (CCOO) reiteraron hoy su exigencia de que el pacto con los empresarios incluya garantías de que los salarios ganarán poder adquisitivo, independientemente de lo que suceda con los precios. Sin embargo, los sindicatos dejaron la puerta abierta a que las empresas puedan eludir las alzas salariales pactadas en el acuerdo marco, si su situación económica es mala.

El nuevo tira y afloja se sitúa esta vez en torno a las llamadas cláusulas de revisión salarial. Después de que Juan Rosell negara en una entrevista el pasado martes la posibilidad de incluir estas cláusulas, los sindicatos le conminaron hoy a “sentarse a negociar”; dejar de cruzar mensajes a través de los medios de comunicación; y ceder en cuanto a la inclusión de esas cláusulas que garanticen la ganancia de poder adquisitivo, incluso si la inflación se mantiene en el 2,6% actual, según datos del INE.

En su respuesta a la entrevista publicada el martes por Cinco Días, los sindicatos afean a los empresarios determinadas prácticas que “no benefician el diálogo social”, y les piden que “se sienten a negociar”, al tiempo que les recuerdan que la comisión de seguimiento del Acuerdo por la Negociación Colectiva – el foro donde deberían cruzarse las ofertas – lleva sin reunirse desde el pasado 16 de noviembre.

Adaptarse a la situación de las empresas

CCOO y UGT recuerdan que su exigencia se cifra en que los salarios deben subir entre un 1,8% y un 3% este año; y que el pacto debe incluir la “generalización” de una cláusula de garantía que “equilibre” el ritmo de incremento de los salarios cuando la evolución de los precios supera la inflación prevista”. “Se trata de una herramienta imprescindible”, recalcan.

Ahora bien, las centrales dejan abierta la puerta a que, tanto el incremento salarial, como las cláusulas de revisión, se ajusten a la situación económica de las empresas. Es decir, el pacto marco no se convertirá en una obligación para todas las empresas con convenio colectivo, sino en una recomendación que guíe la negociación colectiva.

Los sindicatos recuerdan a CEOE que el pacto marcaba unos plazos que han sido ampliamente “sobrepasado”, al tiempo que piden a la gran empresarial y a la patronal de las pymes, Cepyme, que “no eludan sus responsabilidades” y se sienten a negociar.

El rapapolvo sindical llega después de la citada entrevista en la cual Rosell reiteraba la oferta patronal de que los salarios suban este año entre el 1% y el 2%, más medio punto adicional en función de la productividad; al tiempo que negaba la posibilidad de incluir dichas cláusulas en el pacto de rentas. “La inflación es una cosa y los pactos salariales otra, aunque aceptemos que hay que tenerla en cuenta”, dijo, tras explicar que a los empresarios les es “muy difícil” aceptar una cláusula de garantía salarial.

Según las previsiones de Rosell, “no parece posible” que la inflación se descontrole por encima del 2,5% a finales de año. “Al revés, lo más lógico es que baje”, vaticinó.