El sindicato Comisiones Obreras (CCOO) ha lanzado duras críticas contra el sistema de formación para el empleo (FPE) concebido por el Gobierno ‘popular’, y en particular contra los cursos de la denominada formación de oferta, de cuyos fondos una cuarta parte – esto es, 64 millones de euros – han quedado sin gastar en la convocatoria de 2016, según sostiene el sindicato.

Las críticas del sindicato se centran en la llamada formación de oferta, aquella en que las entidades pujan por recibir las ayudas, y luego buscan alumnos para los cursos beneficiados por unos fondos recaudados a través de la cuota de formación que pagan empresas y trabajadores.

Tras la última reforma del Partido Popular, los sindicatos y la patronal quedaron apartados de los órganos de decisión donde se elige a las entidades que impartirán los cursos; si bien los agentes sociales aún conservan un importante papel en este subsistema de formación para el empleo, que recibe cuantiosos fondos.

Ahora, tras conocer los datos de 2016, la organización sindical ha criticado, no solo los 64 millones no ejecutados en el ejercicio, un 26% del total de la dotación del subsistema de formación de oferta; sino también otras cuestiones, relacionadas la mayoría con la irrupción de los grupos empresariales en la ejecución de los cursos.

Oligopolio de la formación de oferta

En particular, CCOO reprocha al ministerio de Empleo, impulsor de la reforma, que 24 sectores productivos no han recibido ninguna ayuda en la concesión de los fondos; mientras que otros 64 ramas sectoriales han recibido fondos que están por debajo de la financiación que les corresponde en base al número de trabajadores que ocupan.

Además, con la entrada de las empresas como principales actores en la impartición de los cursos, según los datos de CCOO, tan solo 19 entidades aglutinan casi 56 millones del total de las ayudas concedidas, y participan cada una en una media de 23 planes de formación.

La central describe además la relación que se establece entre grandes y pequeñas empresas de formación. “Son grandes consultoras que apenas disponen de aulas y plataformas de teleformación propias. Se limitan a alcanzar ‘acuerdos de disponibilidad’ con pequeñas academias a las que atraen con su supuesto conocimiento ‘experto’ de las convocatorias, y a las que una vez cobrada la ayuda, someten a sus ‘reglas’”, sostienen desde el área de formación del sindicato.

Volcadas en la formación ‘online’

“Además, en ocasiones, la pequeña academia cobra mucho después de que la consultora solicitante reciba la ayuda; en otras, tiene que pagar un porcentaje de lo que le correspondería”, añaden.

CCOO también critica la orientación a la formación ‘online’, a través de Internet, que ofrecen estas grandes empresas que están ganando los concursos convocados por el ministerio de Empleo.

“Estas entidades ofrecen masivamente cursos generalistas en modalidad ‘online’, nada menos que un 80%; mientras que los informes de la FUNDAE (Fundación Estatal para la Formación en el Empleo) demuestran que este tipo de formación es la menos valorada por los alumnos y la que menor impacto tiene en su desarrollo profesional”, sostienen.

“Visto el completo fracaso de su reforma, el gobierno debería volver a la casilla de salida y acordar con los agentes sociales un sistema de formación para el empleo que atienda las exigencias de empresas y trabajadores, en vez atender las de las grandes consultoras de formación”, concluyen.

“La incapacidad de la Administración para realizar una asignación eficiente de los recursos disponibles se pone de manifiesto, tanto en la existencia de excedentes como en una oferta formativa desequilibrada sectorialmente, que deja sin cursos a las ramas productivas que no resultan rentables para las academias privadas”, remachan.