El consejero delegado de ING España y Portugal, César González-Bueno, describe en el curso de la Apie en la Universidad Menéndez Pelayo en Santander «una estrategia dictada por el cliente», desde que el grupo holandés desembarcara en España en 1999 con el mensaje de «tu otro banco». Ahora el próximo movimiento será el asesoramiento de inversiones, «acompañar de la mano» a sus clientes para que inviertan a largo plazo «con un riesgo bajo».

«El gran reto es convencer al ahorrador de que estará mejor en una inversión a largo plazo«, sostiene.

Dentro de esa estrategia, la utilización de los datos «es fundamental» para ofrecer a cada cliente el producto que necesita. Obviamente, ese planteamiento responde al interés de ING de llevar al cliente hacia productos y servicios que puedan generar más beneficio, pero «es bueno para la entidad financiera y para el cliente, y cuando es bueno para los dos hay que hacerlo». «Lo que nos comprometemos es a cobrar poco, que las comisiones sean razonables y que eso venga de una eficiencia muy alta y de una vocación de servicio y crecimiento». En ese sentido, César González-Bueno considera MiFid II «una bendición».

Al mismo tiempo, ING profundiza en su plan de ser un banco 100% móvil, porque «ha multiplicado por 3 los contactos por cliente al mes». César González-Bueno pronostica que en 2020 el móvil será el canal que más negocio genere.

El acuerdo sobre los cajeros

El consejero delegado de ING España y Portugal subraya que el acuerdo con el Popular para que sus clientes puedan utilizar los cajeros automáticos de la otra entidad (y en el que participa también Credit Mutuel) «no tiene por qué estar en peligro» tras su absorción por el Santander.

ING ha conseguido «canalizar a sus clientes a los cajeros que sean más convenientes para entidad y el individuo», algo que «ha producido unos ingresos muy importantes para Popular». «Al Popular le van a seguir interesando esos ingresos. Si no le interesa, ya le interesará a otros, y si no le interesa a otros, estamos hablando de prácticas anticompetitivas», precisa César González Bueno.