En el primer trimestre del año, el consumo de los hogares franceses se mantuvo estable, después de haber aumentado un 0,6% en los tres últimos meses de 2016, mientras la formación de capital fijo creció un 1,2% entre enero y marzo, frente al crecimiento del 0,7% del trimestre anterior, según el Instituto Nacional de Estadística de Francia (Insee).
Por su parte, la balanza comercial registró un retroceso del 0,6%, tras el 0,1% de incremento en el cuarto trimestre del año pasado, después del retroceso del 0,7% de las exportaciones, frente al crecimiento del 1,1% anterior, mientras las importaciones aumentaron un 1,2%, tras subir un 0,6% en los tres meses anteriores.
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