El Grupo Catalana Occidente ha remitido una nota a sus empleados en la que afirma que tomará todas las medidas necesarias para garantizar que su actividad pueda desarrollarse «con normalidad, en un marco estable y en un entorno de seguridad jurídica y económica».

En la carta, firmada por el presidente de la compañía aseguradora, José María Serra Farré, se resalta que el grupo que tiene como prioridad la obligación de preservar los intereses de sus clientes, trabajadores, mediadores y accionistas.

Y que velará siempre para que sus productos y servicios «no se vean en ningún caso afectados por la coyuntura política y social».

También recuerda que está presente en más de 50 países y que en sus más de 150 años de historia ha vivido situaciones diversas y muy complejas.

«Vamos a estar muy atentos a todos los acontecimientos y en función de cómo se desenvuelvan los hechos, tomaremos de forma ágil las decisiones que sean oportunas, para preservar los intereses de nuestros clientes, trabajadores, mediadores y accionistas», finaliza José María Serra Farré.

Con esta declaración, la aseguradora deja la puerta abierta a un potencial traslado de sede, que se encuentra en  Sant Cugat (Barcelona).