El escenario que se ha abierto en la lucha por el control de Abertis inicia un periodo que puede durar hasta 2018. La oferta de ACS, que ha empezado a ser valorada por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV, obliga al primer oferente -Atlantia- a revisar su estrategia si quiere contar son posibilidades para hacerse con la empresa de autopistas. El organismo regulador se pronunciará en principio en un mes.

Y parece que no quiere renunciar a su objetivo de creación del primer grupo de autopistas de peaje del mundo.Tras hacerse pública la opa de Hochtief-ACS ha señalado que «está  evaluando la situación y no excluye hacer modificaciones en su oferta en los próximos meses». Si bien siempre había defendido que los 16,5 euros ofrecidos valoraban adecuadamente el grupo, ahora tiene que enfrentarse a una oferta que da un valor al grupo que preside Salvador Alemany por 18.580 millones (más de 2.000 millones por encima del suyo).

Está claro que Florentino Pérez, presidente de ACS, no se lo ha puesto fácil a la empresa italiana, que tendrá que ofrecer los 19 euros para competir. Lo que se transmite al mercado es que tiene capacidad para comprar la empresa aunque su valor llegue a los 19.000 millones, una cifra significativamente más alta que la contenida en sus cálculos iniciales.

Aunque la Caixa, primer accionista de Abertis con un 22% del capital, tiene tiempo para decidir en función del desarrollo de los acontecimientos, el consejo de administración de la empresa de autopistas aprobó por unanimidad el informe en el que valora la opa presentada por la italiana Atlantia, y la considera “positiva y atractiva” desde el punto de vista industrial, aunque cree que el valor de la contraprestación en efectivo es “mejorable”. El órgano de gobierno, que se reunió ayer miércoles en su sede de Madrid, señala en su preceptivo informe que el precio ofrecido es “razonable”, pero que está por debajo de su actual cotización. Existe “margen para su mejora”.