Los bancos supervisados directamente por el Banco Central Europeo (BCE) pasarán a ser 119 en 2018, frente a los 125 a principios de este año, tras la revisión anual sobre su significancia y los cambios en las estructuras de 5 grupos bancarios.

La filial en Fráncfort del Barclays Bank PLC ha sido identificada como significativa al aumentar su tamaño y será supervisada directamente por el BCE desde el 1 de enero de 2018.

En cambio, el banco austríaco Raiffeisen-Holding Niererösterreich Wien y la filial alemana del grupo financiero sueco SEB AG no han cumplido ninguno de los criterios de significancia en tres años consecutivos, por lo que su supervisión se transfiere a las autoridades nacionales competentes (Austria, en el primer caso, y Alemania, en el segundo).

El portugués BPI ha sido adquirido por CaixaBank; el Banco Popular, por el Grupo Santander. Y se ha retirado las licencias bancarias a la Agencia Francesa de Desarrollo (a petición propia) y a los italianos Veneto Banca y Banca Popolare di Vicenza.

Cada año, el BCE revisa todos los parámetros que determinan si una institución de crédito o un grupo bancario cumple todos los criterios de significancia de acuerdo con el Mecanismo Único de Supervisión (MUS), incluidos el total de activos y las actividades transfronterizas.

Esta evaluación anual incluye a las entidades de crédito, los consorcios financieros y los grupos financieros mixtos establecidos en la eurozona, así como a filiales en el área de entidades de otros países miembros de la Unión Europea.

Según la valoración, los bancos son clasificados en significativos, y por tanto supervisados directamente por el BCE, o menos significativos, que lo son por las autoridades nacionales competentes.