Durante el periodo de crisis económica se produjo una disminución de 66.573 compañías en España, siendo el sector de la construcción el más afectado (42%), mientras que el sector de la agricultura aumentó el número de empresas un 17%. Por otro lado, se destruyeron 1.900.000 empleos, siendo también un descenso desigual en los distintos sectores: el sector de la construcción redujo un 64% sus puestos de trabajo; la industria, un 28%; los servicios, un 8%; y el sector de la agricultura, sólo un 1% de los empleos.

Por otro lado, la facturación total de las empresas en España cayó un 10% desde 2006 hasta 2014. En el caso de la construcción, el descenso fue del 65%, el sector más castigado de todos, pero la industria y los servicios se mantuvieron prácticamente estables y la agricultura la incrementó incluso un 29%.

En cambio, la productividad media por empleado en España aumentó un 14% durante dicho periodo, pero no porque se vendiera más, sino porque, como se ha apuntado, la destrucción de empleo fue mucho mayor que la disminución de la facturación de las empresas.

Estos datos se desprenden del Informe “Evolución del tejido empresarial español de 2006 a 2014” elaborado por el profesor del IESE, Miguel Ángel Ariño. El documento se analiza la situación de la empresa española en el año 2006, antes de iniciarse la última crisis económica, y su comparación en el año 2014, una vez superada ya esta recesión. Para su elaboración, se han examinado las empresas contenidas en la base de datos SABI (Sistema de Análisis de Balances Ibéricos), que elabora Informa D&B (la cual no contempla el sector financiero ni el asegurador). El estudio tampoco ha recogido el sector público, el trabajo de los autónomos ni las pequeñas empresas.

La mayor productividad por empleado en Cataluña y Madrid

La disminución en el número de empresas en la Comunidad de Madrid fue mínima (1%), y la destrucción de empleo estuvo muy por debajo de la media española (-257.644 empleos, un 10%). En el caso de Cataluña, la reducción en el número de empresas fue sensiblemente mayor que la media nacional (20.637 empresas, -18%), y la destrucción del empleo fue igualmente destacada (-417.096 empleos, 24%). La facturación total de las empresas se mantuvo estable en la Comunidad de Madrid, pero en Cataluña se registró un descenso del 13%.

En cambio, siguiendo los datos publicados en el informe, la productividad por empleado (si bien aumentó en todas las Comunidades, debido a la alta destrucción de empleo en todas ellas) aumentó en Cataluña por encima de la media nacional (+14%), y en Madrid (+12%).

Previsiones de crecimiento

El informe contempla unas previsiones del crecimiento del PIB del 3,2 % en España para 2018 y considera que el impacto de la crisis catalana será mínimo, aunque su autor, Miguel Ángel Ariño, afirma que aunque “la probabilidad de sufrir una crisis importante en los próximos 6 meses es pequeña, el riesgo en los próximos 10 años es muy grande y las crisis serán mucho más profundas. La globalización y las nuevas tecnologías convierten al mundo en un polvorín”.