El banco suizo UBS ha registrado pérdidas de 2.224 millones de francos suizos (1.891 millones de euros) en el cuarto trimestre de 2017, frente a las ganancias de 636 millones de francos suizos (541 millones de euros) del mismo periodo del año anterior como consecuencia del impacto negativo de 2.865 millones de francos suizos (2.435 millones de euros) asumido en relación con los ajustes en los créditos fiscales de la entidad a consecuencia de la reforma tributaria de EEUU.

Sin tener en cuenta el efecto de este ajuste, el resultado de UBS en el cuarto trimestre de 2017 sería un beneficio neto de 641 millones de francos suizos (545 millones de euros).

De este modo, en el conjunto del pasado ejercicio UBS obtuvo un beneficio neto atribuido de 1.165 millones de francos suizos (990 millones de euros), una cifra que representa una caída del 63,6% respecto al resultado de 2016.

Asimismo, el banco helvético indicó que operará con una ratio de capital ‘fully applied’ CET1 en torno al 13%, mientras que su ratio de apalancamiento será del 3,7% desde 2018 y hasta 2020.

«2017 fue un año excelente para nosotros», declaró Sergio P. Ermotti, consejero delegado de la entidad, destacando que UBS cumplió su objetivo de reducción de costes, fijado en 2.100 millones de francos suizos (545 millones de euros).

Asimismo, el banco anunció que lanzará un plan de recompra de acciones propias de hasta 2.000 millones de francos suizos (1.701 millones de euros), incluyendo hasta 550 millones de francos suizos (468 millones de euros) en 2018.