El eterno heterodoxo

06/07/2018

Miguel Ángel Valero. El profesor José Manuel García Gil publica en "Prender con keroseno el pasado" una monumental biografía del poeta gaditano Carlos Edmundo de Ory.

Carlos Edmundo de Ory es, posiblemente, el gran escritor maldito de la literatura española, que atesora una gran tradición de estos singulares personajes. Pero este casi desconocido poeta gaditano (1923-2010) se lleva la palma. Por eso es tan oportuna «Prender con keroseno el pasado. Una biografía de Carlos Edmundo de Ory». del profesor de Lengua y Literatura José Manuel García Gil.

Esta monumental obra, 570 páginas, de la persona que editó la antología «Cuentos sin hada» (2017) de Carlos Edmundo de Ory, obtuvo el Premio Antonio Domínguez Ortiz de Biografías 2018, que conceden la Fundación Cajasol y la Fundación José Manuel Lara (editora del libro).

Uno descubre en este libro (que tardó cinco años en escribirse) a una de las personalidades más heterodoxas de la cultura española. Su obra es, como escribe Caballero Bonald, «un notable ejemplo de vitalidad creadira, de estrategia independiente frente a cualquier precepto de curso legal, defendiendo lo que el ejercicio de la literatura tiene de aventura, de peligro indagatorio, de búsqueda de normativas no coincidentes con los patrones de más habitual divulgación». Éste describe a Carlos Edmundo de Ory como «en sentido literal un arquetipo».

García Gil defiende que «es una galaxia de biografías: no sólo su obra puede leerse como una biografía, sino que su biografía es la historia de muchas vidas». Está la «del eterno heterodoxo que trabaja de espaldas al mundo», el hombre enamorado, el padre desorientado,el amigo inconstante, el personaje que el propio Carlos Edmundo de Ory se encarga de ir construyendo para los más variados usos y propósitos, y que ocultó al ser humano que había detrás.

Pero también la biografía que han ido diseñando los que conocieron a Carlos Edmundo de Orylos estudiosos, y cada uno de los lectores de su obra.

En la trabajada biografía realizada por José Manuel García Gil se atisba a Carlos Edmundo de Ory como una vida legendaria, un fundador de escuelas, un expatriado, un rebelde, un ser caprichoso e ingobernable, enemistado con toda clase de convencionalismos, un desarraigado de la oficialidad literaria. En definitva, un personaje tan a contracorriente que prácticamente nadie le entendió, ni a él ni a su obra, pese a su inteligencia y su capacidad, reflejada en su poesía, sus aforismos, sus cuentos y sobre todo su Diario.

Se descubre un escritor casi secreto, sin premeditada intención de serlo, marcado por al heterodoxia y por su coherencia. «Era un excéntrico, alguien que estaba fuera del centro», entendiendo éste como escuela, canon o grupo literario.

«Deberíamos acercanos a su obra sin perder de vista aquellos elementos biográficos que definen su personalidad y estilo. Esa falta de clasificación, esa heterodoxia, convierten su literatura, alejada de modas y corrientes machaconamente homogéneas, en algo intemporal y al alcance de lectores de cualquier edad o condición», recomienda García Gil.

Al mismo tiempo, la biografía de Carlos Edmundo de Ory ayuda a descubrir y a entender mejor los entresijos y avatares del siglo XX, la España de la posguerra, el París de mediados de centuria, las polémicas con otros escritores y amigos, las relaciones entre el autor y su entorno. Este inigualable personaje y escritor «extraterritorial» vivió las vicisitudes de la pasada centuria «a fondo, dentro y fuera, de manera independiente, con libertad crítica y pasión escritural», hasta el punto de converturse en «espejo replicante» de la época que vivió.

 

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