El surf es un deporte bastante antiguo que ya practicaban los habitantes de Polinesia durante el siglo XVIII. El capitán James Cook presenció cómo surcaban las olas y realizaban piruetas los aborígenes en el mar en su primer viaje a Tahití en 1771. No obstante, todo apunta en que la tabla de surf se inventó en Hawai. El teniente James King visitó esta isla en marzo de 1779 quedó totalmente perplejo ante lo espectacular y peligroso que era el surfing.

Desde entonces, la cultura hawaiana y el surf como disciplina deportiva se han ido extendiendo por todo el mundo. El contacto constante con el agua, la libertad que da estar sobre la tabla y la superación propia que se experimentan ha provocado que el surf tenga un aura muy especial y única. Durante el verano, se convierte en uno de los deportes que más practican quienes visitan las playas españolas. De hecho, dentro de nuestras fronteras hay playas que están plagadas de surferos y que tienen olas perfectas para deslizar la tabla sobre ellas. La más famosa es Mundaka (Vizcaya), pero también destacan en el norte las asturianas, como Rodiles y Salinas, en Cantabria, Valdearenas, y, también en el país vasco, Punta Galea y Zarautz.  En las Islas Canarias hay también playas con buenas olas, como Las Américas, en Tenerife, o la de Famara, en Lanzarote.

Escoger una tabla adecuada para practicar este deporte no es una tarea sencilla, puesto que es el paso más importante para comenzar a evolucionar y disfrutar sobre las olas. Sin embargo, si entras en Loco Rider, podrás elegir entre una gran cantidad de tablas de gran calidad y con diseños muy trabajados.

No importa el estilo de surf que practiques, ya sea Longboard, Big Waves o aéreos de infarto. Las medidas de las tablas de surf vienen dadas normalmente en pies y en pulgadas. Un pie son 12 pulgadas, y una pulgada son 2,54 cm. Esto es lo que tienes que tener en cuenta a la hora de adquirir una tabla. ¡Atento!

La longitud:

Es la distancia que hay entre el nose, la punta de la tabla, y el tail, la cola de la tabla. Cuanto más larga es la tabla de surf, más sencilla resulta la remada y pasar secciones de la ola.  Cuando se van a surfear olas grandes, se emplean tablas de más de 7′, para arrancar antes sobre la ola, y tener mejor control de la tabla.

Por el contrario, en las olas pequeñas se usan tablas más cortas, de tipo shortboard o de surf fish. Las maniobras son mucho más sencillas con estas. Las tablas más recomendables para los principiantes son las evolutivas o las tablas minimalibu largas, que tengan entre 6,8 y 8 pulgadas.

La anchura:

Se mide en el punto más ancho de la tabla, desde un canto hasta el otro. Cuanto más ancha sea, más estable resultará y, cuanto más estrecha sea, más velocidad y rendimiento adquirirá. Las tablas anchas son ideales para aprender.

El grosor:

Es el espacio que se encuentra entre la parte superior del deck y la parte inferior del bottom. Influye en gran medida en el rendimiento global, especialmente en la flotabilidad y la facilidad para remar.

Ya sabes en qué te tienes que fijar para escoger la mejor tabla dependiendo de cuál sea tu experiencia y tus necesidades. ¡Lánzate al mar a coger olas!