Los ingresos netos de Carlsberg entre enero y junio alcanzaron los 30.966 millones de coronas, unos 4.153 millones de euros, lo que representa un retroceso interanual del 0,7%. Su facturación neta en Europa Occidental retrocedió un 2,7%, mientras que en Europa del Este bajó un 4,2%. En el mercado asiático, las ventas netas crecieron un 7%.

De cara al conjunto del ejercicio, la compañía ha revisado al alza su previsión de resultados y ahora espera alcanzar un crecimiento de entre el 8% y el 9% de su beneficio operativo en términos orgánicos, frente a la anterior proyección de un incremento en torno al 5%.

El consejero delegado de la cervecera, Cees ‘t Hart, ha destacado la fortaleza de los resultados del primer semestre, subrayando la mejoría de los márgenes en todas las regiones y la reducción de la deuda.