Markus Tacke y Rosa García, máximos responsables de Siemens Gamesa

La presidenta de Siemens Gamesa, Rosa García, que lideró esta sociedad desde su creación con la fusión de la empresa española y la división eólica del grupo alemán, abandona el cargo. El consejo de administración de la compañía ha aceptado la dimisión que se hará efectiva el 1 de diciembre, según ha comunicado a  la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), y ha decidido sustituirla por Miguel Ángel López Borrego.

García deja el cargo cuando la tendencia bajista vuelve a afectar al constructor a aerogeneradores. Después de un año anterior malo en Bolsa, este ejercicio se presentó con subidas, que, aunque no devolvían el valor al precio de salida a los mercados bursátiles, sí se decantaba como un cambio de tendencia. Pero, a continuación, Siemens Gamesa retornó a las pérdidas, y ahora acumula un descenso del 15% en 2018, habiendo además perdido los 10 euros por acción.

Esta trayectoria causó profundas divergencias entre el accionista alemán e Iberdrola, el segundo socio de la empresa. El presidente de la eléctrica, Ignacio Galán, denunció lo que consideraba mala gestión y un poder excesivo de Siemens. Ahora, los cambios han sido pactados por los dos grandes accionistas.

Además de posibles fallos de dirección, ese negativo dato está basado en varios temas, desde la competencia de fabricantes asiáticos a cambios en proyectos energéticos en algunos de sus principales mercados, básicamente en India. No obstante, lo que es cierto que la empresa reporta de forma continua sustantivos contratos alrededor del mundo.

Ahora, los cambios en la dirección son considerados por la empresa como la entrada en una nueva etapa, «hacia el liderazgo global con un nuevo presidente y una organización reforzada».