Dia ha dado un paso importante para salvar su futuro. Ha llegado a un acuerdo con Morgan Stanley que garantiza una ampliación de capital por 600 millones de euros. La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) suspendió la cotización esta mañana y finalmente subió un 11,88% al cierre tras haber vuelto a negociarse sus acciones.

La ampliación que más que duplica su actual capitalización bursátil está sujeta a condiciones, como la venta de activos. Según ha comunicado a la CNMV, Morgan Stanley se encargará  de la colocación de la ampliación o la suscribirá al 100% si no se cierra con éxito. En medios consultados se estima que es posible que su principal accionista, Mijail Fridman, que tiene el 29,9% de las acciones, acuda a la operación, y que lance una opa en función de los resultados.

El temor a que Dia no pudiese cumplir sus compromisos financieros en 2019, si bien es un tema que estaba en el ambiente y se proyectaba en un panorama próximo, ha pasado factura a la empresa en Bolsa en pasadas semanas. Ese riesgo se había unido al anuncio realizado por la compañía en el que anunciaba que no iba a cumplir con sus previsiones de beneficios.

Como consecuencia del hundimiento de las acciones, el comité técnico del Ibex decidió su salida del Ibex, con fecha del 24 de diciembre. Este martes perdió más del 19% en Bolsa y la acción se desplomó, superando mínimos históricos.

Un informe de Bankinter reflejaba las dificultades de Dia derivadas de una deuda que asciende a 1.800 millones de euros, un aspecto que conoce la banca de forma directa, y a través de las reuniones mantenidas con la dirección de la cadena, si bien ahora es previsible que el acuerdo se logre con más facilidad. La suma de cuestiones financieras se ha llegado a trasladar al funcionamiento de la cadena, y en especial a la relación con los proveedores.