El último mes del año dejó una grata sorpresa en los registros de empleo. El número de afiliados a la Seguridad Social creció en 78.000 personas en el último mes del año, mejorando el dato de 2017. Una mejora que vino de la mano del comercio y de los servicios sanitarios y sociales, y sobre todo gracias a la buena cosecha de aceituna en el campo; y no de la hostelería. Y que vino acompañada de un descenso del paro en 50.000 personas; peor que el año pasado.

La suma de 78.500 afiliados en diciembre sitúa el número total de afiliados por encima de los 19 millones de cotizantes, relativamente cerca de los niveles alcanzados en 2007. Y en cifras de máximos en el caso de las mujeres, que, con 8,8 millones de afiliadas, sitúan el registro en su nivel máximo de toda la historia. Nunca hubo tantas mujeres trabajando en España como hasta ahora.

La excepcional campaña de la aceituna en Jaén se esconde detrás de este empujón a la afiliación. Solo el régimen agrario aporta cerca de 53.000 de los 78.000 afiliados medios ganados en diciembre; un 68%; se trata del tercer mayor incremento en volumen de afiliados en diciembre de toda la serie histórica.

También se ganó empleo en comercio, servicios sanitarios y sociales, y Administración Pública. Por el contrario pierde empleo la hostelería y, siguiendo su cíclico declive estacional, la construcción y la industria manufacturera.

De hecho, si se eliminan los efectos estacionales, el aumento del empleo se limita a 55.800 personas; frente a los 78.000 afiliados más registrados en diciembre.

De este modo, la ocupación cierra el año con unos 565.000 afiliados más, creciendo a un ritmo superior al 3%. El régimen general, con un alza cercana al 3,7%, lidera el aumento de afiliados, mientras los autónomos logran casi 50.000 nuevos afiliados a lo largo de 2018, un 1,5% más, tras permanecer casi invariados en diciembre.

El empleo sube en 2018 en todas las comunidades autónomas, lideradas por Madrid, rozando un incremento del 4%; le siguen la Comunidad Valencia, Castilla-La Mancha, Canarias, Andalucía, Murcia, Baleares y Navarra, todas ellas por encima del 3%.

En la Administración Pública se inventarían 70.000 empleados más que hace un año, con datos de noviembre. Destaca el crecimiento en la Administración estatal, un 4,3%; muy por encima del 2,9% de la tasa de crecimiento en el conjunto de Administraciones, según los inventarios de entes públicos.

Peor dato de paro desde 2011

El paro, sin embargo, matizó la alegría que proporcionan los buenos datos de ocupación ofrecidos hoy. El desempleo bajó en diciembre. Y lo hizo por tercer mes consecutivo. Además, seis de cada diez parados alcanzaron alguna protección. Sin embargo los 50.500 parados menos en diciembre suponen el peor dato desde 2011.

El paro en diciembre bajó sobre todo entre las mujeres y los jóvenes. De los 50.500 parados menos, 45.000 eran mujeres. Un descenso que se concentra en la agricultura, y sobre todo en los servicios. Y tras el cual se halla el empleo temporal, según veremos. No en vano, si se elimina el efecto estacional, el descenso se queda en menos de 9.000 personas. En términos generales, en cambio, el paro subió en la industria y la construcción.

De este modo el paro cierra 2018 en su menor nivel de los últimos 9 años, con unos 3,2 millones de parados registrados en los servicios públicos de empleo. El número de mujeres paradas – 1,8 millones – sobrepasa ampliamente al de los hombres, 1,3 millones.

Los contratos registrados crecen con fuerza en diciembre hasta sumar la cifra más alta en ese mes de toda la serie histórica. La mayoría son temporales. Pero los indefinidos superan los 2,2 millones a lo largo del año, la cifra más alta de toda la serie histórica, creciendo un 18,4%.

Seis de cada cuatro parados cobraron algún tipo de ayuda en noviembre, el último dato disponible. El gasto – y la cobertura – crece al 2%, con una nómina en prestaciones y subsidios que supera los 1.500 millones mensuales. Aun así, más de 1,35 millones de parados no reciben ninguna ayuda.