‘Nekrassov’, Brillante farsa sartreana

30/01/2019

Luis M. del Amo. José Luis Alcobendas firma una sobresaliente interpretación en esta divertida comedia de Sartre.

Nekrassov, la comedia dirigida por Dan Jemmett con base en el único texto cómico que firmó el Premio Nobel y destacado filósofo existencialista francés Jean-Paul Sartre, constituye un excelente ejemplo de integración de todos los elementos en una función; desde la interpretación – con un pletórico José Luis Alcobendas –, hasta la música, el vestuario y la escenografía; para componer una vertiginosa farsa política cuyo asunto gira en torno a la veracidad de las noticias en la prensa, y su falseamiento, en plena guerra fría.

La comedia estructura su anécdota en torno a la fuga de De Valera, un timador brillantemente interpretado por Ernesto Arias, que, tras algunas vicisitudes, conseguirá usurpar la identidad de un supuesto disidente soviétivo, el tal Nekrassov, cuya desaparición utilizarán el director y los dueños de un periódico como ariete para cortar el ascenso al poder de los socialistas, en beneficio de los conservadores franceses durante la posguerra.

Con estos elementos la comedia da muestras ya de su buen tino al comienzo de la representación, cuando el estafador De Valera es salvado de morir ahogado en el Sena por dos pobres diablos en una escena donde brilla ya el discurso manipulador del charlatán, que se plasma en los primeros diálogos.

Luego, con brillante cadencia, irán apareciendo el resto de personajes, hasta completar una amplia nómina encarnada por siete actores, Carmen Bécares, Miguel Cubero, Palmira Ferrer, Clemente García y David Luque, quienes, junto a los mencionados Alcobendas y Arias, y doblando personajes en su mayoría, ofrecen al espectador un goce continuado al contemplar la sobresaliente interpretación en tono de farsa, caracterizada por gestos amplios y muy definidos, personajes a mil por hora, y donde destaca un Alcobendas sencillamente sensacional, tanto en su papel principal del periodista Sibilot, como en el episódico Demidoff.

Un auténtico placer contemplar a este actor transformarse a voluntad, desde lo más pequeño, el gesto de una mano, hasta la danza borrachuza de su emigrado ruso. Un diez de principio a fin. Y un trabajo que ayuda a engrandecer el trabajo de sus compañeros, excelentes todos ellos, con especial mención al Palotin de Luque, o al De Valera de Arias, sin olvidar el policía de Cubero, el Mouton de Ferrer, la doble entrega de Becares, o la triple de García.

Un magnífico trabajo actoral, muy bien conjuntado, que lleva al espectador en volandas a lo largo de las dos horas que dura la función.

Todos ellos permanecen casi constantemente sobre el escenario, aunque no participen en la escena, con la excepción de algunos cambios; una circunstancia que agiliza las transiciones, muy marcadas gracias a la muy bien escogida música (que los actores lanzan desde el escenario: ¿una cuestión de derechos?), y que en conjunto, procuran al espectáculo breves y bien medidos descansos, que contribuyen a fijar en el espectador las coordenadas de la trama, con un ritmo rápido y preciso, nunca atropellado, que se desenvuelve sobre la eficiente escenografía firmada por el propio Jemmett, junto a Vanessa Actif, y bajo la expresiva iluminación de Valentín Álvarez.

Un gozo continuo. Y un brillante ejemplo del modo de interpretar una farsa.

No se la pierdan.

¿Te ha parecido interesante?

(Sin votos)

Cargando...

Aviso Legal
Esta es la opinión de los internautas, no de diarioabierto.es
No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.
Su direcciónn de e-mail no será publicada ni usada con fines publicitarios.