El déficit de la emblemática entidad de la cultura catalana es fruto del “impacto de las regularizaciones de los hechos derivados del fraude” protagonizado por el ex presidente de la Fundación Orfeó-Palau de la Música Catalana, Félix Millet, y su mano derecha, Jordi Montull, que fueron detenidos el 23 de julio de 2009 tras un registro practicado en las oficinas de la entidad por parte de los Mossos d’Esquadra. Dos meses después de su detención, Félix Millet confesó su latrocinio en un escrito enviado al juez.

El ex presidente y el ex director administrativo del Palau son los dos grandes implicados en el escándalo que sacudió a la sociedad catalana y que protagonizó la última campaña electoral de las autonómicas por las ramificaciones del caso entre dirigentes de CiU. El PSC denunció que el Corsorcio pidió que no se imputara en las investigaciones judiciales sobre pagos irregulares realizados por MIllet al ex tesorero de CDC, Daniel Osácar, y al responsable de inmigración del mismo partido que integra CiU, Àngel Colom, cuando éste último era dirigente del Partit per la Independencia.

De momento, el juez imputa a Félix Millet y Jordi Gasull la desaparición de 2,3 millones de euros entre los años 2003 y 2004, aunque esta cifra ya se ha quedado corta. Según las investigaciones realizadas por la Fiscalía, el agujero en la institución catalana supera los 10 millones de euros, pero los expertos indican que la cifra final podría doblarse. El Consorcio agrupa a representantes de la Generalitat, el Ayuntamiento de Barcelona, el Ministerio de Cultura y el Orfeó Català, como entidad propietaria del edificio.

El cierre provisional del ejercicio 2010 presentado ante Artur Mas por el director general del Palau de la Música, Joan Oller, y la presidenta del Orfeó Català, Mariona Carulla, arroja unos ingresos de 6.582.746 euros procedentes del alquiler de la sala, las transferencias corrientes de las administraciones, las transferencias de capital y los ingresos patrimoniales. Los gastos del ejercicio fueron de 6.941.178 euros, aunque estas cuentas están pendientes de aprobación por la auditoría de la Intervención General.

En la reunión también se ha aprobado un presupuesto del Consorcio de 5.266.530 euros para 2011, un 20% por ciento menos que en 2010, y en el que la caída en las aportaciones de las administraciones por los recortes presupuestarios, unido a la reducción de las aportaciones de las empresas patrocinadoras, se compensa con la disminución de las transferencias corrientes.

Oller y Mariona Carulla, que pertenece a la familia propietaria de Agrolimen, investigada por presunta evasión fiscal, también han presentado las líneas generales del plan estratégico del Palau de la Música para los próximos cuatro años. El plan se propone potenciar el Orfeó y los coros de la institución; “la construcción de un discurso artístico propio”, la voluntad de consolidar un proyecto educativo fuerte, acercar el Palau a las problemáticas sociales del barrio; aumentar el público; internacionalizarlo, y maximizar los ingresos, convirtiendo el Palau en una entidad «el máximo de eficiente posible».