En su comparecencia ante el Comité de Servicios Fionancieros de la Cámara de Representantes estadoundiense, el jefe de la Fed subrayó su opinión de que las recientes turbulencias de los mercados son «pasajeras» y no tendrán mayor efecto en la economía a medio plazo, si bien recalcó que la Reserva Federal tiene preparadas nuevas medidas de estímulo por si fueran necesarias.

Aunque Bernanke no entró en detalles sobre la naturaleza de estas medidas, sí admitió que se trataría de estímulos no puestos en marcha hasta el momento, con lo que daría un paso más allá de lo realizados hasta ahora con las QE1 y QE2 desarrolladas hasta ahora y que concluyeron el pasado 30 de junio.

Bernanke indicó que se trataría de una batería de medidas «no probadas» anteriormente con las que la Fed saldría al paso de cualquier deterioro sustancial de las condiciones de crecimiento económico. Estas nuevas medidas se complementarían con las ya conocidas de compra de bonos y mantenimiento de bajos tipos de interés.

A este último respecto, Bernanke reiteró que no contempla cambios en los tipos de interés, que se mantendrán bajos «un dilatado periodo de tiempo», dado que segñun las previsiones de la Fed, las presiones inflacionistas que aparecieron en los últimos meses tendrán a descender en el futuro más inmediato.