El presidente de la Mutualidad de la Abogacía, Enrique Sanz Fernandez-Lomana, entre el presidente de la Escuela de Pensamiento: Cultura y Economía para el Envejecimiento, José Miguel Rodríguez-Pardo, y el coordinador, Fernando Ariza.

La Fundación de la Mutualidad de la Abogacía pone en marcha la Escuela de Pensamiento Cultura y Economía para el Envejecimiento, contemplada en el Plan Estratégico de la entidad, que busca «interactuar de forma más intensa con la sociedad desde la innovación y la investigación sobre la longevidad», explica su presidente, Enrique Sanz Fernandez-Lomana.

Partiendo de los valores propios del mutualismo, la Escuela de Pensamiento se constituye como «un espacio solidario de opinión y reflexión independiente e intergeneracional sobre la longevidad mediante el que, desde diferentes áreas del conocimiento, van a aportar valor a toda la sociedad».

Esta iniciativa «se diferencia de la forma  tradicional de abordar este concepto tal como lo hacen otras instituciones públicas y privadas y entidades del sector de las finanzas y seguros, muy orientadas hacia la promoción de sistemas previsionales complementarios al primer pilar estatal y con una connotación muy apegada a su actividad empresarial principal», subraya el presidente de la Mutualidad de la Abogacía y de su fundación.

El presidente de la Escuela, José Miguel Rodríguez-Pardo, subraya que este proyecto nace de la necesidad de abordar la longevidad, “el mayor reto y a su vez mayor riesgo de la sociedad del siglo XXI”, «como un nuevo concepto de conquista social, lejos de la visión que la sociedad tiene en este momento donde se asimila la ancianidad a una carga social y económica y la senectud es sinónimo de invisibilidad o indiferencia». «Se trata de situar en el  centro de la propuesta a la persona que envejece con todo su caudal patrimonial y sus valores morales y culturales en armonía con las limitaciones propias de la edad alcanzada pero llena de oportunidades», añade.

La Escuela abarcará todas las áreas del conocimiento necesarias para abordar esta realidad, desde las ciencias actuariales, sociales, economía, demografía, biomedicina, psicología, ética, filosofía, humanismo o el Derecho, entre otras».

Y abordará la preparación y convivencia con la última etapa en la vida de una persona, no sólo desde la perspectiva del ahorro individual, sino también desde otras realidades: pobreza energética, exclusión social, gentriificación, adecuación de la vivienda, dependencia, soledad, patrimonio inmobiliario y no líquido, ayuda a los hijos en riesgo de desempleo, sobrecoste de la alimentación, brecha por diferencia de esperanza de vida, deterioro de la salud, ocio.

Sus primeras tareas son un estudio sobre «Comportamiento del consumidor y la determinaciíon de los estímulos de ahorro para los jóvenes», encargado al Laboratorio de Economía Experimental de la Universidad de Valencia; y otro sobre «El envejecimeinto en la empresa, nueva medida del mapa de riesgo empresarial», que se realiza en colaboración con la Asociación Española de Gerencia de Riesgos y Seguros (Agers).

Consejo Científico

Además de José Miguel Rodríguez-Pardo, presidente, y de Fernando Ariza (subdirector general de la Mutualidad de la Abogacía), coordinador, el Consejo Ejecutivo de la Escuela de Pensamiento está formado por Laura Duque, directora de Cumplimiento Normativo de la Mutualidad, que actúa como secretaria.

También figuran María Luz Durban, catedrática de Estadística de la Universidad Carlos III;  Antonio Garrigues Walker, presidente de la Fundación Garrigues; Emilio Lamo de Espinosa, presidente del Real Instituto Elcano; Antonio López Farré, profesor Titular de la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense; Victoria Ortega, presidenta del Consejo General de la Abogacía Española y de Unión Profesional,  y consejera de la Mutualidad; Carlos María Romeo, catedrático de Derecho Penal en la  Universidad del País Vasco; y Amelia Valcárcel, catedrática de Filosofía Moral y Política en la UNED,