El grupo Villar Mir, que se mantiene como principal accionista por debajo del 50% del OHL, ha reconocido ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que analiza, en una fase preliminar, ofertas de inversores para vender su participación. Para la selección de los eventuales compradores ha contratado a Société Générale, lo que se ha traducido en un alza del valor en Bolsa, que ha llegado a superar el 12%. Ha cerrado apuntándose un 7%.

Esta subida, que se une a la acumulada en las últimas semanas, llevan a la empresa de construcción e infraestructuras a cotizar en récord anual, después de un larga trayectoria a la baja que le llevo fuera del Ibex. Los rumores sobre posibles candidatos a adquirir la participación de Villar Mir se han centrado en empresas del sector, que puedan estar interesadas en sus activos, posiciones en concesiones y en su cartera de pedidos. El último candidato que ha emergido es la italiana Salini Impregilo. No obstante, y pese a la recuperación del valor, OHL capitaliza en Bolsa poco más de 330 millones de euros, precio que puede ser muy atractivo para grupos de la competencia.

La empresa se ha beneficiado, asimismo, de la mejor atmósfera en las negociaciones con la banca acreedora y la aplicación de medidas de saneamiento. Si bien, OHL presentó unas pérdidas de 1.529 millones de euros en 2018, debidas básicamente a la reestructuración de su cartera y de su negocio de concesiones. En esta línea, los datos del pasado ejercicio fueron bien recibidos en el mercado, y más ante las previsiones de entrada en rentabilidad en 2019.

Mas detrás del comportamiento en Bolsa está, en primer lugar, los posibles movimientos corporativos con la posible venta de la participación del 34,6% en manos de la familia Villar Mir, proceso que implicaría el lanzamiento de una opa, que, en medios financieros, se prevé que sea amistosa. El distanciamiento de la actual dirección – el consejero delegado José Antonio Fernández Gallar- respecto a la familia que aún es el primer socio se ha hecho patente en los últimos meses. La constructora reclamó recientemente la devolución de 120 millones de euros que prestó al Grupo Villar Mir, que será pagado con el programa de desinversiones.