Elvis Costello eleva aún más su enorme rascacielos de obras maestras

–Con “Look Now” demuestra que su genio no ha sufrido daño con el cáncer.

Elvis Costello se quedó sin voz en algunas de las canciones que interpretó el pasado verano en su directo en Madrid. Tiempo después se sabía que tenía cáncer. Ni corto ni perezoso se puso a combatirlo con coraje y con genio y publicó un álbum extraordinario. Se titula “Look Now” y, como en el es habitual, eleva aun más su rascacielos de obras maestras y recuerda que en el mundo del pop hay viejos arquitectos que saben construir nuevas edificaciones.

Abre el disco con “ Under Lime”, una canción mitad pop mitad soul; mitad sensibilidad, mitad energía atómica salpimentada con coros y metales que alcanzan la perfección armónica. Un gran introito, para todo lo que viene a continuación. Una balada “Don´t look Now”,  donde la melancolía se hace arte. “Burnt sugar is so Bitter”, medio tiempo soul por el que Paul Weller hubiera dado lo que le pidieran y luego “Stripping Paper”, el momento cumbre de las docenas de “momentazos” que tiene el álbum, una de esas canciones que te provoca lágrimas de emoción. Algo parecido pasa con “I Let the Sun Go Down”, joya que nace de su amor a Kinks.

Y con “Photographs Can Lie”, y con “He´s Given”Costello, contrasta su genialidad con otros artistas de elite que le acompañan, entre ellos, Burt Bacharach y Carole King. Pero la impronta es suya.  Si sigue  construyendo obras de este tipo, cada vez estará más cerca del póker de ases (Neil Young, Bob Dylan, Van Morrison, Hendrix) y formará el repopker magistral del rock.

Sello: Concord, Precio: 10. Discos: “My Aim is True”, “This Years Model”, “Armed Forces”. Influido por: Beatles, Kinks, Dylan. Influye: en todo el punk, pop y rock desde finales de los 70

 

Son Volt: la búsqueda de la perfección vaquera

–La banda de Jay Farrar reedita “The Search”, una de sus obras maestras

Son Volt pintan como nadie atardeceres de incendios y humos en las praderas vaqueras. Y anocheceres tan negros como bocas de coyote. Y madrugadas en las que el ruido de las piedras al resquebrajarse se confunde con el de guitarras que no han dormido en toda la noche y siguen emocionando en las cantinas borrachas, mientras buscan la perfección.

Son Volt, la banda dirigida por la enorme sensibilidad de Jay Farrar, es el legado fiel, riguroso y ejemplar de Gene Clark y Gram Parsons. Surgidos de las cenizas de Uncle Tupelo, como los propios Wilco, están comandados por el perdedor del duelo Jeff Tweedy- Jay Farrar que dió  origen a la disolución del grupo semilla pero a la bendita existencia de tres grupos ahora en el olimpo del country alternativo y la americana más perfecta.

Son Volt han reeditado su disco de 2007, “The Search”, una obra maestra que contiene gemas del estilo de “Bleed The Line”, “Beacon Soul” o “The Picture”, una canción con la que Farrar perdió su virginidad anticomercial y se avino a hacer un tema con gancho, incluidos trompetas y saxos. Una maravilla que no le satisfizo y le hizo regresar a sus melancólicos y lánguidos atardeceres. Hay otros once temas extras que darían para otro álbum magistral.

Sello: BMI. Precio: 14. Discografía: “Trace”, “Wide, Swing, Tremolo”, “Honky Tonk”. Influidos por: Uncle Tupelo, Gene Clark, Byrds. Influyen en: Fakebook, Hello Friends, Mastersons.