Considerada por los consumidores como la marca española de bebidas más querida y auténtica, La Casera lleva presente en nuestras vidas desde 1949, año en el que nació de la mano del emprendedor de origen francés Francisco Duffo Foix. Sus productos (la gaseosa, Tinto de Verano, Tinto de Verano Limón y, ahora, Distinto de La Casera) son recordados con cariño por muchas generaciones. Por su carácter y su papel en las costumbres culinarias de los españoles, la histórica casa de comidas del gran Lucio Blázquez ha elaborado un menú maridado con las referencias Tinto de Verano y Distinto de La Casera. Podrá ser degustado al precio de 45 euros durante todo el mes de junio.

El menú consta de cuatro platos: para empezar, los míticos huevos rotos de Casa Lucio seguidos de una sopa de ajo, receta típicamente castellana que en este establecimiento la bordan (lleva ajo, pimentón, pan, caldo de ave y huevo). Esta especialidad surgió después de la guerra por pura necesidad y en los años 50, allá por el nacimiento de La Casera, se había convertido en un manjar habitual tanto en las tabernas como en los cafés de tertulia de Madrid.

A continuación Casa Lucio propone el capón en pepitoria, una de los platos más longevos y demandados del establecimiento (con permiso de los huevos). Debido a la preferencia que mostraba la reina Isabel II por este plato, en el siglo XIX la pepitoria se convirtió en un imprescindible de los banquetes de la corte y, por extensión, de las celebraciones en las casas donde solía haber gallinero. Por eso la han elegido para rendir tributo a una marca que ha estado siempre presente en las reuniones familiares y en las fiestas y celebraciones con amigos. En Lucio sustituyen la gallina o el pollo por capones criados en libertad porque tienen mucho más sabor.

Por último, el menú incluye pan perdido, uno de sus postres de referencia. Ha sido escogido para este homenaje en alusión al origen galo del fundador de La Casera. El pan perdido (pain perdu en francés) es una receta francesa similar a la torrija en la que el pan se desmenuza previamente haciendo el postre más ligero, suave y jugoso. A diferencia de la original, aquí se sirve en frío con azúcar caramelizado y helado.

Este menú especial se sirve acompañado de las dos referencias que mejor representan estos valores de innovación y de apuesta por la proximidad: Tinto de Verano (el tinto de verano número uno en hostelería, elaborado con vino Tempranillo y gaseosa) y Distinto de La Casera, el último lanzamiento de la marca a base de vino blanco de uva Verdejo, gaseosa y zumo de limón natural de la cuenca del Mediterráneo.

De esta manera y durante las próximas semanas, dos iconos míticos que han estado vinculados a nuestra gastronomía a lo largo de generaciones, se van a ver las caras en una efeméride tan sabrosa como entrañable.