No han pasado ni tres días de la tregua comercial entre China y EE.UU., y Donald Trump ya ha vuelto a las andadas. En este caso, el blanco de sus amenazas ha sido la Unión Europea, a la que podría aplicar aranceles en productos por valor de 4.000 millones de euros que van desde tubos de hierro fundido hasta alimentos. Según el presidente americano, sería una represalia para castigar a Europa por las ayudas públicas que ha prestado a Airbus y que hacen que Boeing sea menos competitiva.

A raíz de esta noticia las bolsas europeas han cotizado en rojo durante buena parte de la sesión, pero han girado alza en la recta final. Las ganancias han sido moderadas en las plazas de París (+0,16%), Fráncfort (+0,04%) y Madrid (+0,18%), y más intensas en Londres y Milán. El MIB italiano ha sumado un 0,65% coincidiendo con la intención de su ejecutivo de reducir el déficit, mientras que el FTSE británico ha cerrado en máximos de 9 meses tras sumar un 0,82%.

Ante la ausencia de publicaciones macroeconómicas, buena parte de las miradas se han centrado en la reunión que la OPEP y sus socios externos han celebrado en Viena. A pesar de que se ha cumplido con el guión y se han prorrogado 9 meses más los controles de producción, el petróleo caía un -3% en el cierre de las bolsas europeas. Teniendo en cuenta que con este pacto la oferta de petróleo está relativamente controlada, en los próximos meses los precios dependerán de las expectativas de demanda.

Dentro de la bolsa española, han destacado los valores más sensibles a la política de tipos del BCE, con subidas para el sector eléctrico y con descensos para el sector bancario, que hoy ha visto como el Euríbor12M marcaba nuevos mínimos históricos en el -0,233%. Los valores más alcistas han sido Enagás (+2,59%) y Endesa (+2,02%), y los más bajistas Ence (-4,43%), Acerinox (-3,94%) y Bankia (-2,47%).

Tras el claro mensaje de apoyo a la economía que dieron el BCE y la Fed la pasada semana, hoy se ha sumado el Banco de Inglaterra. Tras un discurso de su gobernador Mark Carney, el mercado ha interpretado que el organismo británico podría mover ficha (bajando tipos de interés) incluso antes de octubre, que es la fecha prevista del Brexit. Así lo demuestra la cotización de la libra esterlina, que ha vuelto a caer hoy y ya está en mínimos desde enero.

En España, los datos de paro registrado han quedado algo peor de lo esperado pero siguen mostrando la mejora del empleo. En junio el número de desempleados cayó en otras 63.000 personas y la afiliación a la Seguridad Social ha marcado un nuevo máximo histórico con 19,51 millones de afiliados.

En el mercado de renta fija la caída de rentabilidades parece no tener fin. La del bono alemán a diez años ha descendido hasta el -0,36% y la del español hasta el 0,29%, lo que sitúa la prima de riesgo española en los 65 puntos básicos. Por su parte, el rendimiento del US Treasury a diez años ha caído de nuevo por debajo del 2%.