La Federación explicó que los cierres y cambios de titularidad hasta julio afectaron a un 2% de los puntos de venta y resaltó que actualmente otras 1.000 empresas del sector consideran «su supervivencia en grave e inminente peligro».

Asimismo, añadió que más del 50% de los ceses de actividad se compensa con la apertura de nuevos centros y explicó que entre enero y mayo el sector de la reparación de automóviles ha perdido un 1,5% de sus trabajadores ocupados.

Baja la demanda

Por otro lado, Conepa indicó que la demanda en los talleres de automóviles ha experimentado una disminución del 4% durante los siete primeros meses del año, lo que afecta especialmente a centros de gran tamaño, aunque también a los medianos y pequeños.

La organización señaló que este descenso de la demanda estuvo mitigado por la evolución positiva experimentada entre finales de junio y el mes de julio, por la incidencia de las revisiones de antes de las vacaciones de verano, permitió reducir la caída acumulada en un 5,5%.

El secretario general de Conepa, Víctor Rivera, subrayó que las empresas pequeñas, que en su mayor parte son negocios familiares, «se les están acabando las reservas» y apuntó que los especialistas en reparación de carrocerías están sufriendo ahora por el descenso de la contratación de pólizas a todo riesgo y por las presiones de las compañías de seguros para abaratar sus costes.