Cuando entramos en la edad juvenil son muchas las novedades que empezamos a experimentar con el objetivo de descubrir cosas inéditas y vivir experiencias que antes no hemos compartido. Es en estas épocas cuando empezamos a salir, a interactuar con un número más grande de gente, a beber e incluso a fumar, y es que mucha gente asocia esta acción con las relaciones sociales.

Pero dentro de la práctica de fumar ahora ya no solo encontramos los tradicionales paquetes o el tabaco de liar, sino que existen otras alternativas como el uso de la cachimba electrónica. También llamada shisha (o narguile o hookah) por su origen oriental, se trata de un instrumento indio que se utiliza para fumar tabaco filtrado por agua que no es tan perjudicial para la salud. Esto es debido a que el dispositivo permite purificar el humo tras su paso a través del agua, con lo que se consigue que este no cause el mismo daño para los pulmones.

Fumar en cachimba recrea un clima de calma y relajación en un entorno proclive a las conversaciones relajadas y reflexivas entre personas

Pero además de no aportar tantos efectos perjudiciales a aquellos que les gusta fumar, la cachimba también tiene un objetivo social. Son un símbolo de paz, de anti prisa y de tranquilidad que se asocia a relacionarse con otras personas alrededor de una mesa bajo un principio de relajación. Pretende ser una excusa que lleva a la conversación agradable y tranquila en un entorno perfectamente calmado en el que los aromas de la shisha actúan como incensos capaces de hacer reflexionar a cualquiera. Esta predisposición a fomentar las relaciones con los demás, sumada a su alta capacidad para minimizar los riesgos del tabaco, es algo que ha hecho que esta práctica se haya extendido durante los últimos años y se haya normalizado en las sociedades occidentales.

No solo adultos, sino también los más jóvenes se han embarcado en esta práctica que les facilita aquello de relacionarse con un número mayor de personas a partir de compartir una misma actividad. Además, para aquellos principiantes o poco expertos en el arte de fumar, utilizar una cachimba hace que fumar sea mucho menos invasivo y, por lo tanto, mucho más sencillo. Pero para ello es cierto que hay que tener en cuenta los tipos de shisha que existen y las características clave de ellas, ya que va a ser importante elegir una cachimba que disponga de la mejor calidad.

Por supuesto, en gran parte la elección va a depender del presupuesto que tenga cada persona a la hora de hacerse con una. En la plataforma El Badia vas a encontrar un montón de opciones con diferentes disposiciones y complementos que se van a adaptar a lo que esté más acorde tanto con tus hábitos comunes como con tus gustos estéticos, ya que existen muchísimos diseños de cachimbas, siendo este un instrumento que aporta un plus en la decoración de tu hogar.

¿Qué tipos de cachimba puedo encontrar?

A la hora de comprar este dispositivo es importante que sepas identificar de qué partes se compone y qué características base debe tener una buena shisha. Una cachimba tiene los siguientes elementos y/o necesita de todos ellos para poder utilizarse debidamente:

– Un depósito para el tabamel, que es una pasta humedecida que concentra pulpa de fruta, tabaco de shisha, melaza y miel.

– Un plato para acumular las cenizas del carbón.

– Una manguera, es decir, el elemento por el que se fuma. El modelo puede tener una o varias salidas en función de para cuántas personas esté pensada.

– Un embudo que se introduce dentro del agua para enfriar el humo.

– Unas pinzas para sujetar el carbón.

– Unas bases de cristal, vidrio, metal, cerámica o cobre, dependiendo del modelo.

– Unas boquillas para inhalar el humo.

Las cachimbas más solicitadas y más recomendadas son aquellas fabricadas con vidrio, ya que dicho material permite que el tabaco y su aromatización se pueda saborear de forma óptima. Para escoger la opción que más se ajuste a tus gustos o necesidades, también deberás tener en cuenta si quieres que tu instrumento sea de uso totalmente individual o para compartirla con otras personas, ya que en ese caso deberás escoger alguna que tenga varias mangueras o boquillas. También importa el tamaño, y es que existen opciones de todo tipo para facilitar su uso: algunas de grandes dimensiones con efectos decorativos importantes y otras mucho más manejables, en modo viaje, que se pueden transportar con facilidad y que son ideales para aquellos novatos en el arte de fumar en cachimba.