Elaboración: diarioabierto.es

El gasto por desempleo continúa creciendo con fuerza. Si a a principios de año esta partida, que sumó el año pasado unos 17.500 millones, crecía un ritmo anual inferior al 4%, el pasado mes de junio – último con datos disponibles –, el desembolso volvió a aumentar a un ritmo cercano al 8,5%, cercano al registrado un mes atrás – en mayo – en la estadística de Servicios Públicos de Empleo (SEPE).

El crecimiento del 8,4% en junio de los gastos por desempleo en comparación anual culmina una senda de subidas, que no ha dejado de acelerarse en los últimos meses. En 2018, los gastos por desempleo terminaron el año prácticamente con el mismo gasto que en 2017, después de años de fuertes descensos.

En octubre de 2018, la subida apenas llegaba al 1%, que llegó a doblarse durante los dos meses posteriores; para rondar a continuación la cifra del 4%, y superarla en abril, hasta casi el 5%; para instalarse a continuación en torno al 8,5% en mayo y junio.

La evolución reciente de los gastos por desempleo contrasta con su marcha desde 2013. Así, frente al incremento del 5,3% con que ha cerrado el primer semestre de 2019, el desembolso en protección por desempleo no hizo sino bajar en los seis anteriores ejercicios: un -0,03% en 2018; un -6,24% en 2017; un -9,57% en 2016; un -16,12% en 2015; un -9,09% en 2014; y un -14,68% en 2013.

Los beneficiarios suben un 2% en junio

En cambio, el número de beneficiarios de estas prestaciones por desempleo y subsidios reflejan de momento un incremento menor. Así, en junio la nómina de receptores de ayudas aumentó apenas un 2% en relación al mismo mes.

Un incremento que es incluso menor en el acumulado del año, de enero a junio, cuando el número medio de beneficiarios se situó en torno a 1,82 millones, más o menos igual que en el primer semestre del año anterior.

En 2012, el número de beneficiarios rozó los 3 millones, un umbral que incluso se llegó a superar dos años atrás, en 2010. En los últimos seis años, el volumen de receptores no ha dejado de bajar, si bien este año, si la tendencia continúa, puede representar también el final de esa tendencia.

En cuanto al gasto, este llegó a superar los 32.000 millones de euros en 2010, una cifra que volvió a rozar dos años después en 2012. En los últimos seis años la partida no había dejado de bajar, si bien los casi 17.500 millones de euros del año pasado apenas supusieron una reducción del 0,03% respecto a 2017.