A la espectacular subida de la cotización del petróleo de ayer que siguió al ataque con drones a refinerías de Arabia Saudí, este martes el alza se ha corregido a la baja, si bien las cotización del Brent (crudo de referencia de Europa) ha vuelto en algunos momentos a pagarse en 68 dólares el barril, aunque después bajaba a 66 dólares. El Ibex ha reaccionado de nuevo a la baja, con empresas energéticas liderando las subidas, aunque Repsol -plana- no se ganaba el apoyo de los inversores.

En un escenario lleno de incertidumbres, el mercado confía en España en los valores relacionados con energías renovables: la subida de los precios de los hidrocarburos da más atractivo a las tecnologías competidoras, como son la eólica y los solares. Tubos Reunidos es otro valor que se beneficia de esta coyuntura.

La pregunta que parece que se plantean los analistas es que si esta crisis geopolítica va agravarse y cómo influirá en la evolución de los precios. Los informes de Goldman Sachs, JP Morgan y otras firmas especializadas apuntan a que la cotización del Brent subirá a 75 o 80 dólares, aunque los más alcistas estiman que puede llegar a los 100 dólares. Existen interrogantes en estas horas que dificultan la precisión.

En esta línea, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, ha alertado sobre las graves consecuencias de los ataques contra refinerías saudíes para los mercados energéticos, mientras que los rebeldes hutíes, del Yemen, quienes se han responsabilizado de ataque con drones a instalaciones de Aramco en Arabia, han manifestado que seguirán con represalias similares contra Arabia. 

Arabia Saudí, el mayor exportador de petróleo del mundo y que ha reducido la producción en 5,7 millones de barriles por día (50% de su producción), perfilaba en pasados días la salida a Bolsa de Aramco, que no ha fijado un plazo exacto -habla de varias semanas- para la reanudación de la producción al completo. Aramco ha sido más pesimista que el Gobierno de su país a la hora de dar fechas, si bien este martes ha filtrado que la normalidad podría volver en semanas.

En este contexto, el presidente de Repsol, Antonio Brufau, ha manifestado este martes  que el ataque a refinerías de Arabia Saudí, que ha provocado una caída en la producción de petróleo, «no beneficia ni a Repsol ni a nadie», y ha confiado en que la situación se estabilizará pronto.