Samsung Electronics espera contabilizar un beneficio operativo de 7,7 billones de wones (5.874 millones de euros) en el tercer trimestre de 2019, lo que supondría un retroceso del 56,2% en comparación con su resultado del mismo periodo del año pasado, según informó el fabricante surcoreano.

El grupo coreano, que presentará sus cuentas del tercer trimestre a finales de mes, adelantó que sus ventas del periodo comprendido entre julio y septiembre de 2019 sumaron 62 billones de wones (47.300 millones de euros), cifra que representa una caída anual del 5,3%.

A pesar de la caída anual de sus cifras, las proyecciones adelantadas por Samsung han superado las expectativas gracias al impulso del lanzamiento de su smartphone Galaxy Note 10.

De este modo, las ventas de Samsung en el tercer trimestre serían un 10,4% superiores a las contabilizadas durante los tres meses anteriores, mientras que el beneficio operativo del fabricante surcoreano sería un 16,7% mayor.

Analistas consultados por la agencia surcoreana Yonhap apuntaron que un exceso en la oferta de los chips de memoria DRAM y chips de memoria flash NAND, que representan más de dos tercios de las ventas de la firma, redujeron la rentabilidad de Samsung en el tercer trimestre, aunque expresaron su optimismo sobre una mejora más adelante como consecuencia de una estabilización del nivel del inventarios y la creciente demanda.