La venta de Air Europa a Iberia es un cambio radical en el perfil de Globalia -la compañía aérea es un referente del grupo-, aunque por ella ingresará del orden de los 1.000 millones de euros. Si bien se ha impuesto la realidad del fuerte proceso de concentración del sector aéreo a ambos lados del Atlántico, incluso en una etapa de crecimiento del tráfico y con un barril de petróleo lejos de los más de 100 dólares de otras épocas duras para las aerolíneas. Un contexto que ha aprovechado la familia Hidalgo para vender a IAG, cuando también negociaba alianzas con Air France.

Medios del sector turístico señalan en este contexto que la próxima operación que protagonizarán los propietarios de Globalia es un acuerdo con el grupo Barceló, que se negocia desde hace semanas, para constituir una gran compañía emisora en la actividad turística.

La alianza la protagonizarían Ávoris (división de Barceló) y la agencia de viajes y el touroperador de Globalia (Viajes Halcón y Travelplan). La propiedad de la nueva sociedad se repartiría al 50%.

El grupo ha presentado a Adif la pasada semana, junto a Talgo (y su principal accionista),una de las ofertas para competir con Renfe en el transporte de alta velocidad. La ventaja de esta propuesta respecto a los problemas que se detectaron en otras posibles alianzas es que Talgo cuenta con material rodante, al igual de la francesa SNCF.