El Tesoro ha colocado 3.586,29 millones de euros en una subasta de bonos y obligaciones, elevando la rentabilidad ofrecida a 10 años y a 15 años, mientras que en el bono a 5 años ha cobrado menos a los inversores que en la emisión previa.

La demanda conjunta de las cuatro referencias subastadas se ha acercado a los 8.000 millones de euros, más del doble de lo finalmente adjudicado, lo que demuestra que los mercados siguen confiando en los títulos de deuda española, a pesar de la rebaja de la previsión de crecimiento para España que ha hecho pública la Comisión Europea.

El Tesoro ha colocado 970,01 millones de euros en el bono a cinco años, frente a unas peticiones de más de 2.200 millones, y ha ofrecido un tipo de interés marginal del -0,190%, frente al -0,210% de la emisión del 17 de octubre.

En la subasta a 10 años ha colocado 1.012,62 millones de euros, frente a los 2.300 millones solicitados por los inversores, y la rentabilidad marginal se ha colocado en el 0,301%, más elevada que el 0,256% de la emisión del 17 de octubre.

El Tesoro ha adjudicado 1.035,66 millones en la subasta de obligaciones a 15 años, con una demanda de 1.695 millones, y el tipo marginal se ha colocado en el 0,705%, también más elevado que el 0,658% que se ofreció en la emisión del 19 de septiembre.

En la subasta del bono a 5 años ligado a la inflación de la zona euro, las peticiones han superado los 1.600 millones y el importe adjudicado ha sido de 568 millones, con una rentabilidad marginal del -1,046%, frente al -1,024% de la emisión celebrada el 4 de julio.

Tras esta primera subasta del mes de noviembre, el Tesoro tiene previsto realizar otras dos emisiones de letras los martes días 12 y 19 de noviembre, así como otra de deuda a largo plazo el próximo jueves 21 de noviembre.