«Los métodos carecen de importancia cuando el resultado es eficiente«. Esta frase aparece en la página 51 de «El cuento del espejo», de Rui Díaz, obra ganadora del XXXVIII Premio de Narración Corta Felipe Trigo (organizado por el Ayuntamiento de Villanueva de la Serena, Badajoz, y editado por la Fundación José Manuel Lara).

Se trata de una fábula contemporánea que muestra, a través de las peripecias de un becario en una empresa demoscópica, el cinismo y la inmoralidad de la politica basada en las encuestas.

Es «pura casualidad», precisa el autor, que se presente la obra justo después de la repetición de unas elecciones generales, que pueden derivar en el primer Gobierno de coalición de la democracia española. «La realidad puede permitirse el lujo de ser inverosímil, la ficción, no«, sentencia Rui Díaz (profesor de Lengua y Literatura, autor de «Los turistas», «El aniversario», «El jardín botánico», «Las cunas torcidas», y como líder del grupo musical Rui Díaz & La Banda Imposible, del LP «Los heraldos negros»).

Se nota, como confiesa el autor, que «El cuento del espejo» fue escrito inicialmente como obra de teatro. Pero eso no quita valor a un relato que descubre los entresijos de la política a través de una empresa demoscópica que recibe un singular encargo semanas antes de unas elecciones que pueden cambiar el destino del país.

Rui Díaz juega con los diálogos entre los profesionales del análisis y el becario, con preguntas y respuestas que llevan forzosamente a un dilema ético. Y lo hace con un ritmo muy ágil, divertido, mordaz, que sabe utilizar la ironía y el humor y que recrea la figura del espejo, tan utilizado por Valle-Inclán o por Borges, pero también por la tradición de los cuentos populares. De paso también interpela sobre la función ética del periodismo y sobre su compromiso con la sociedad.

«El voto se mueve no por la necesidad del cambio, sino por la esperanza de que ese cambio sea posible«, se lee en la página 41 de «El cuento del espejo», una fábula sobre los engaños, los trampantojos, las conspiraciones que siempre rodean al poder.

Es, en ese sentido,  una aportación muy interesante para conocer la trastienda de las decisiones que toman los políticos, no siempre pensando en los ciudadanos ni en el interés general, pero en todo momento pendientes de unas encuestas, pese a que saben perfectamente que están cocinadas.

La cuestión no es si el fin justifica o no los medios, sino que todo desemboca en el fin de los medios. Porque lo único que vale es el resultado, y el dato que lo avala.