Los sectores inmobiliario y de educación lideraron la creación de empresas en 2017, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) publicados hoy miércoles. Por su parte, el cierre de 49.000 comercios al por menor no halló compensación en las 43.000 aperturas registradas ese año; lo que arroja la desaparición del 1,2% de las empresas del sector comercial, según el registro demografía empresarial.

Inmobiliario, educación, y también otras actividades profesionales, científicas y técnicas, escalaron al primer puesto en el escalafón de sectores con mayor número de nacimientos empresariales en 2017, últimos datos disponibles.

Todas estas actividades se sitúan además por encima de la tasa de crecimiento neto de empresas que de media se sitúa en el 1,4% en 2017 para el conjunto de sectores; resultado de restar la tasa de muertes de la tasa de nacimientos empresariales.

Así, en 2017, nacieron en España 336.000 empresas, y desaparecieron unas 285.000; lo que deja el ‘stock’ o número de empresas que operaron en España ese año (todo o en parte) en un total de 3,58 millones de compañías; un 0,5% más que el año anterior.

Se trata del cuarto año consecutivo en que los nacimientos supera a las muertes de compañías. Y además la variación neta – unas 51.000 empresas más que en 2016 – supera ligeramente las cifras de 2015 y 2016.

Tanto los nacimientos como las muertes de firmas crecieron en 2017. Sin embargo, el número de nacimientos fue superior al de las muertes, lo que arroja una tasa de crecimiento neto de empresas del 1,4%; el mismo valor que en 2016.

Industria y comercio pierden tejido empresarial

Por sectores, sin embargo, las cifras ofrecen variaciones significativas. El comercio arroja la mayor pérdida de empresas en ese período con respecto al año anterior. En 2017 se perdieron unas 4.000 empresas en este macrosector, un 0,5% del total.

Una caída aún mayor si descendemos al nivel más detallado de las divisiones. En esta clasificación (CNAE 2009), los números muestran el cierre de casi 49.000 comercios al por menor (excepto vehículos de motos y motocicletas). Una cifra que no pudieron compensar los casi 42.000 nacimientos. Y que arroja una tasa neta negativa del -1,2%, que contrasta con el 1,4% que muestra del total de la demografía empresarial española en 2017.

Por el contrario, los sectores que más nacimientos brutos de empresas registraron ofrecen también tasas positivas cuando se cruza esta cifra con las muertes, como sucede en Otras actividades profesionales, científicas y técnicas, un 5,9%; actividades inmobiliarias, un 4,3%; y educación, un 3,7%.

Volviendo a las grandes sectores, la industria también perdió unidades empresariales en 2017, un 0,1%. Por el contrario, la construcción ganó un 1,4% y el resto de servicios (excluido el comercio), un 2,4%; mientras que la gran rama comercial perdió un 0,5% de sus empresas, según se apuntó.

El número total de empresas que operan en España encadena cuatro años seguidos de crecimientos, hasta superar los 3,58 millones; lejos aún del máximo alcanzado en 2008 de 3,71 millones.

El 55% de empresas, sin asalariados

De los 3,58 millones de empresas en España, más de 2 millones carecen de asalariados; mientras que 1,2 millones tienen entre 1 y 4 personas en plantilla. Además operan apenas 200.000 empresas con entre 5 y 9 asalariados; y otras 145.000 con diez asalariados o más.

Un 22,6% de las empresas desaparecen en su primer año de vida; en tanto que el contingente de empresas nacidas en 2012 quedó reducido a menos de la mitad con el paso de cuatro años.

Por territorios, la mejor diferencia entre las tasas de nacimiento y de muerte se encuentra en Baleares, un 3,2%, seguida de Canarias, un 2,6%; Madrid, 1,9%; Cataluña, 1,6%; Comunidad Valenciana, 1,6%; y Extremadura, 1,5%; todas ellas por encima de la media nacional del 1,4%.