Un ingeniero español crea la primera aplicación que reduce el consumo de botellas de plástico

24/12/2019

Miguel Ángel Valero. Las botellas de Closca Water cuentan con un chip NFC en su tapón inferior, que cuantifica la cantidad de veces que se rellena, por lo que mide el impacto positivo de cada usuario y le da recompensas por no generar residuos plásticos.

Closca Water App es la primera aplicación del mundo que reduce el consumo de botellas de plástico. Carlos Ferrando, emprendedor y fundador de la la empresa, ha ideado esta app que geolocaliza las fuentes públicas, los restaurantes, las cafeterías o las tiendas donde cualquier usuario puede recargar gratis su botella de agua. Una propuesta pionera en pro de la sostenibilidad y que ofrece en España ya 17.000 puntos de rellenado, más de 200.000 en todo el mundo incluyendo países como Alemania, Bélgica, EEUU, Reino Unido.

La empresa fue fundada en 2013 por Carlos Ferrando, un joven ingeniero que estudió en la Universitat Politècnica de València. La compañía está especializada en el diseño y la innovación, creando productos como cascos y botellas que promueven un futuro más sostenible.

Closca ha obtenido varios reconocimientos como startup innovadora: premio Instituto IDEAS (Universitat Politècnica de València); premio en la categoría startup de 5Ucv de la Generalitat Valenciana, ganador de España en el Climate-KIC Accelerator Program, todos en 2015.

Carlos Ferrando ha sido seleccionado por Richard Branson, fundador de Virgin, como uno de los 50 ‘Líderes excepcionales’, en elevento de networking celebrado en 2019 en Necker Island, la isla privada del magnate y filántropo en las Islas Vírgenes.

Botellas ‘inteligentes’

Esta aplicación y otras iniciativas de Closca tratan de hacer frente a una realidad contundente: en España se consumen al año 480.000 millones de botellas de plástico, y más de 1 millón de botellas de plástico se consumen al minuto en el mundo. Y de ese millón, sólo a un 9% de estos recipientes se les da más de un uso. Una situación que, de seguir así, se podría convertir, según la ONU, en una potencial alarma sanitaria en menos de tres años.

Ante esto, Closca ha lanzado una colección de botellas inteligentes, de resistente cristal borosilicato y reutilizables, con el fin de reducir el consumo de botellas de plástico. El lanzamiento de cuatros nuevos modelos de la Closca Bottle, uno de los productos estrella de la firma, forma parte de la campaña “Consciousness”, con la que se quiere dar visibilidad al estado de muchos de los iconos de la naturaleza que se encuentran en riesgo de desaparecer.

Por este motivo, cada botella inteligente tiene un color (aguamarina, coral, beige y mostaza) que representa los glaciares (se están derritiendo, fraccionándose y desapareciendo debido a las altas temperaturas provocadas por el efecto invernadero); los corales (los animales que dan nombre a este color están muriendo y perdiendo su tonalidad debido a las elevadas temperaturas del agua); las playas (los microplásticos y la basura acumulada están acabando con ellas, y con la fauna y flora de las mismas); las sabanas (un hábitat especialmente amenazado por la desaparición de su vegetación y de las miles de especies que dependen de su biodiversidad).

Además, el 10% de la venta de las botellas se va a destinar a una organización sin ánimo de lucro. “Vamos a destinar un porcentaje de los beneficios a diversas ONG que tienen como misión luchar por la protección de estos maravillosos iconos de la naturaleza que tan necesarios son para mantener el equilibrio de nuestro ecosistema,” afirma Carlos Ferrando, CEO y fundador de Closca.

Las botellas inteligentes son prácticas y versátiles, ya que es posible llevarlas encima siempre gracias a una solapa que abraza cualquier mochila, maleta o bicicleta. Su diseño innovador ha sido galardonado con el prestigioso Red Dot Design Award 2015 y 2017.

Incentivar la sostenibilidad

Otro punto diferencial de estos productos es su tecnología. Las botellas cuentan con un chip NFC en su tapón inferior, que cuantifica la cantidad de veces que se rellena, por lo que mide el impacto positivo de cada usuario al no utilizar plástico de un solo uso para beber y le da recompensas por no generar residuos plásticos.

Además, Closca Water App localiza más de 200.000 puntos de ‘recarga’ de agua potable en todo el mundo, de los que más de 20.000 de estos están en España. Esto permite al usuario encontrar, en cualquier momento y lugar, las fuentes públicas y establecimientos donde es posible rellenar las botellas de forma gratuita.

Gracias a Closca Water App, los usuarios alargan la vida de sus botellas y evitan seguir consumiendo plástico. “El objetivo de Closca es concienciar sobre los retos que tiene nuestra sociedad y actuar ofreciendo productos y servicios que inspiran actitudes positivas”, afirma Carlos Ferrando.

Closca Water App está pensada como una plataforma para incentivar las acciones sostenibles de los usuarios. Por cada recarga de agua que se haga, el usuario recibe recompensas en forma de descuentos y productos, o donaciones a ONG. Además, la aplicación propone una serie de desafíos a las personas que la usan con el objetivo de motivarlas y generar un mayor impacto positivo. Se trata de desafíos geolocalizados (consiste en que el usuario siga un recorrido propuesto y recargue agua en todos los puntos marcados por la app en un tiempo determinado) y de hábitos (para que el usuario cambie sus rutinas en pro de la sostenibilidad para que sus acciones impacten positivamente en su entorno).

La aplicación, además, favorece a que los usuarios creen una comunidad de personas sensibilizadas con el medio ambiente y que se conecten entre sí compartiendo las diferentes acciones que realizan en su día a día. Según el emprendedor valenciano, “la aplicación te ayuda a encontrar agua estés donde estés, ya sea una ciudad, un pueblo…y estamos viendo cómo las personas de la propia comunidad están contribuyendo añadiendo fuentes que todavía no están registradas». «Los miembros son personas realmente concienciadas», recalca.

Una app interesante para las marcas

Además, a esta aplicación también se pueden unir negocios y marcas sensibilizadas con la sostenibilidad. Por un lado, los negocios físicos pueden ofrecer sus instalaciones como ‘estaciones de servicios’, en los que los usuarios pueden recargar gratis sus botellas. Se convierten, así, en puntos de paso para las personas y pueden promocionar tanto sus servicios como sus productos.

Por otro lado, las marcas que se unan a la aplicación permiten que los usuarios accedan a sus productos con los descuentos que consiguen al llevar a cabo sus acciones sostenibles. El usuario las identifica como marcas que están aportando su grano de arena en pro de la sostenibilidad.

 

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