Prosegur y Telefónica han cerrado una alianza por la que se completa la operación de venta del 50% del negocio de alarmas de la empresa de seguridad en España. El grupo que preside Álvarez-Pallete paga la operación con 49.545.262 acciones que tiene en autocartera (un 0,95% del capital), con un importe superior a los 300 millones de euros. El acuerdo queda sujeto, según el comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), a los ajustes propios de este tipo de transacciones sobre deuda, capital circulante y clientes existentes.

Como consecuencia, la familia Revoredo, principal accionista de Prosegur, pasa a formar parte de los primeros inversores de la teleco. Para la operadora, «la presencia de Prosegur en el accionariado de Telefónica refuerza la voluntad de construir una relación estratégica que genere valor para los socios”.

SI bien, el interés del acuerdo se centra en el ámbito tecnológico y operativo, que permite unir fuerzas en un negocio en crecimiento como es el mercado de alarmas en España. En los próximos días se presentará la marca bajo la que operará la compañía y las ofertas. La nueva sociedad estará participada el 50% por Telefónica y al 50% por Prosegur.

Ambas empresas quieren acelerar el desarrollo del negocio de alarmas en España y evolucionar la oferta de servicios de seguridad residencial y para negocios mediante la generación de soluciones innovadoras para el cliente y la aportación de las capacidades complementarias de ambas compañías.

En los últimos ejercicios, el mercado español de alarmas ha experimentado importantes tasas de crecimiento y se espera que esa tendencia se incremente durante los próximos años por el papel fundamental que ha tomado la seguridad en el hogar conectado, antes posibles robos y oacupaciones.