Los índices sostenibles con sesgo de inversión socialmente responsable (ISR) registraron mejor desempeño que los tradicionales en todas las regiones tanto en marzo como en el primer trimestre del año, según un análisis realizado por Afi.

En un contexto de grandes pérdidas bursátiles por la crisis del coronavirus, los índices MSCI globales, de Estados Unidos, de Europa y de mercados emergentes ofrecieron rentabilidades negativas de doble dígito, con un peor desempeño que los respectivos índices MSCI ISR.

El índice global MSCI ACWI USD cayó un -14,7% en marzo y un -22,5% en el trimestre, frente al -13,2% y -20% que ofreció su versión ISR en esos periodos.

En el caso de Europa, el índice MASCI Europe obtuvo el -16,8% en marzo, que ahondó hasta el -24,8% en el primer trimestre, con pérdidas superiores al MSCI Europa SRI EUR, que ofreció el -13,2% en el último mes y un -20,1% en lo que va de año.

El análisis de Afi sostiene que los mejores resultados derivados de la integración de los factores medioambientales, sociales y de gobernanza (ESG, por sus siglas en inglés) se atribuyen principalmente al control del riesgo.

La inversión sostenible no ofreció una menor volatilidad que la gestión tradicional. En algunos casos, los índices ESG presentaron más volatilidad por el menor número de valores en cartera. Pero presentan menores caídas y una menor exposición a riesgos extremos.

El análisis señala que la máxima caída registrada en los últimos cinco años se produjo en marzo, y los índices sostenibles presentaron descensos menos intensos que los tradicionales.

«Precisamente estos eventos de cola, que puedan generar pérdidas extraordinarias en una compañía, son los que trata de mitigar la inversión en base a criterios ASG», concluye el estudio de Afi.