
Francesco Starace.
El Gobierno italiano ha confirmado a los consejeros delegados de Eni y Enel en sus puestos por tercer periodo consecutivo, a Claudio Descalzi y Francesco Starace, respectivamente. En cambio, ha optado por cambiar a los presidentes en ambas compañías. En medios de ese país esta última decisión refleja la intención del Ejecutivo de controlar más estrechamente la gestión del grupo eléctrico y petrolero que están, asimismo, en el grupo de las compañías más importantes de Italia.
El Estado italiano controla el 30% y el 23,6% del capital de estas compañías y son, más en el caso de Enel en este periodo instrumentos para desarrolla las políticas energéticas de Italia.
Tanto el Partido Democrático en el gobierno, cono su socio el Movimiento 5 Estrellas, quieren elevar las inversiones en energías renovables y hacer de la agenda verde uno de los motores del desarrollo de la economía del país, más ahora que con la crisis del coronavirus el turismo y la hostelería se van a ver seriamente dañados.
Enel es el accionista mayoritario de Endesa, una empresa clave para el grupo italiano por la posición que la aporta en el mercado ibérico y en las energías renovable, así como por los ingresos que le reporta vía dividendos, con una generosa política de retribución a los accionistas. Le permitió también con la venta interna de la chilena Enersis dentro del grupo el acceso con fuerza a América Latina. Starace es un hombre clave en la gestión de Endesa.
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