La era pos-Covid pondrá a prueba el demostrado compromiso ético empresarial

10/05/2020

Claudina Caramuti y Isabel López, de Canvas Estrategias Sostenibles. Más allá de la pandemia...

La crisis sanitaria ha suscitado una toma de conciencia de muchas grandes compañías respecto a su dimensión social. Han interiorizado su sentido de pertenencia a la sociedad y la necesidad de provocar un impacto positivo, en un contexto en el que la implicación de todos era imprescindible para salir adelante como país. Llegada la era post COVID-19, deberán demostrar que esa respuesta ética y solidaria no era algo puntual, sino una apuesta integral hacia un nuevo compromiso social. Así se recoge en el informe Ética empresarial y Agenda 2030 en tiempos de COVID-19, elaborado por Canvas Estrategias Sostenibles a través de su Radar Canvas, con la colaboración de la socióloga y politóloga Cristina Monge, que es asesora ejecutiva de Ecodes (Fundación Ecología y Desarrollo).

El estudio recoge un análisis cuantitativo y cualitativo del comportamiento de las principales empresas del país durante la pandemia, a partir de más de 650 iniciativas promovidas por 56 grandes compañías (el top 3 de 17 sectores económicos), para hacer frente a los retos sanitarios, sociales, laborales y económicos surgidos en torno al coronavirus. Esas iniciativas han sido examinadas desde el prisma de la ética y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), de la Agenda 2030 de Naciones Unidas, a fin de reflexionar sobre el papel del sector privado durante la crisis.

Los valores son el motor de la toma de decisiones, tanto a nivel individual como organizacional, y en un momento de incertidumbre, de pérdida de la confianza social y de la sostenibilidad del sistema económico, las decisiones que toman las grandes empresas impactan en gran medida en el conjunto de la sociedad. Por ello, ahora más que nunca, es necesario revisar y actualizar el concepto de la ética corporativa y reorientar el modelo económico hacia los desafíos de la Agenda 2030.

El coronavirus nos ha hecho sentir más vulnerables, más sociales, más humanos y mucho más interdependientes de lo que pensábamos. Sus efectos a nivel global están aún por determinar, y todos los actores de la sociedad civil, incluidas las empresas, se están replanteando su función en el nuevo escenario. El propio Parlamento Europeo ha hecho un llamamiento a su implicación necesaria en materia de derechos humanos y medio ambiente, para prevenir y mitigar futuras crisis y garantizar cadenas de valor sostenibles. Sin duda, la ética de las organizaciones será determinante para el futuro de nuestras sociedades.

Como ha destacado Cristina Monge: “Estas semanas muchas compañías han experimentado la necesidad de sentirse parte de la sociedad, de implicarse en lo que estaba ocurriendo. Lo importante era ser capaces de hacer algo, de aportar valor. Ahora es el momento de consolidar ese ‘clima ético’ y de que los valores de compromiso, solidaridad y cooperación que han emergido se anclen en el día a día de las organizaciones, consolidando una economía con propósito».

Metodología y resultados
El informe Ética empresarial y Agenda 2030 en tiempos de COVID-19 ha analizado las iniciativas llevadas a cabo por 56 grandes compañías del país (las tres más relevantes por facturación de 17 sectores de actividad) desde el 14 de marzo, día anterior a la declaración del estado de alarma, hasta el 14 de abril de 2020. Para ello, se ha cuantificado el impacto de estas actuaciones a partir de los mensajes en medios digitales, identificándose alrededor de 9.000 apariciones y más de 650 iniciativas diferentes. Posteriormente, los resultados se han contrastado con la visión cualitativa de expertos en sostenibilidad, ética, liderazgo, gobernanza, economía, alianzas, etc. Estas son las principales conclusiones del informe:

Donaciones, a la cabeza. Las iniciativas más numerosas son las relativas a donaciones, ya sea en especie (material sanitario, alimentos, dispositivos electrónicos) o económicas, que representan alrededor del 20% del total.

Gestión de costes. En segundo lugar, se sitúan las iniciativas empresariales relacionadas con el ajuste de costes, reducción o reajuste de actividad y lanzamiento o redefinición de servicios, que se sitúan en el 19%.

Manteniendo actividad y empleo, pero con seguridad. A continuación se encuentran las relacionadas con el mantenimiento de la actividad y del empleo y el refuerzo de las medidas de salud, seguridad y bienestar, que superan el 12%.

Procesos productivos, a punto. Cabe destacar un 8% de medidas que persiguen la adaptación de la producción, los servicios o el personal a las nuevas necesidades.

♦ Grupos de interés. Tomando como referencia los grupos de interés en los que impactan las iniciativas, predominan las dirigidas a la sociedad en su conjunto (41%), aunque cerca del 70% de las empresas analizadas han puesto en marcha medidas de apoyo a al menos tres grupos de interés, entre los que se encuentran también el ámbito corporativo, los empleados, los clientes o los proveedores.

♦ Hacia los ODS. En cuanto a los ODS a los que se vinculan, el 68% de las medidas impulsadas se relacionan de forma directa o indirecta con el ODS 3, Salud y bienestar, y el ODS 8, Trabajo decente y crecimiento económico. En menor medida, se observa un impacto sobre el ODS 10, Reducción de las desigualdades (cerca del 9% de las iniciativas impactan en él), y el ODS 9, Industria, innovación e infraestructura (casi el 8%). Cabe destacar el 5% de propuestas vinculadas al ODS 17, Alianzas para lograr los objetivos, pues se han llevado a cabo gracias a la cooperación y coordinación entre diferentes organizaciones, incluso entre entidades públicas y privadas.

Desempeño por sectores de actividad. El más activo ha sido el financiero, con un 20,6% del total de iniciativas, entre las que predominan las donaciones, moratorias en pagos para clientes o creación de préstamos y líneas de financiación para empresas y pequeños negocios. A cierta distancia le siguen las telecomunicaciones (12,1%), con medidas dirigidas a clientes, como las ampliaciones de suscripciones a canales de TV de pago y el aumento de velocidades de conexión a Internet; y muy próximo se sitúa el comercio minorista (11,3%), que ha promovido mayoritariamente donaciones y campañas de sensibilización.

Aprendizajes tras el COVID-19
En definitiva, la respuesta del tejido empresarial para buscar soluciones éticas, solidarias y colaborativas para paliar los efectos negativos de la pandemia ha sido muy positiva. Sin embargo, lo realmente importante será que los aprendizajes adquiridos en este periodo trasciendan la crisis y se integren en la realidad de las organizaciones. ¿Cómo? Impulsando cambios en su cultura y liderazgo corporativo que deriven en modelos económicos y de producción más éticos y humanos, modelos de gobernanza más participativos y estrategias de alineamiento cooperativo entre las diferentes fuerzas sociales.

El resultado no solo permitirá contar con empresas y sociedades más resilientes, mejor preparadas y capaces de reponerse con mayor agilidad ante futuras crisis. Igualmente, las organizaciones contarán con una imagen corporativa reforzada y una reputación más valorada, que representarán una notable diferenciación para su propio desempeño futuro.

Claudina Caramuti e Isabel López son socias fundadoras de la firma de consultoría estratégica y conocimiento especializada en responsabilidad corporativa y sostenibilidad Canvas Estrategias Sostenibles. Mediante la plataforma de inteligencia social y conocimiento Radar Canvas, esta firma desarrolla desde 2014 estudios, análisis y nuevas ideas para el presente y futuro de la sostenibilidad. Una de esas publicaciones es el informe anual Approaching the future. Informe de tendencias en gestión de intangibles, elaborado junto con Corporate Excellence, cuya quinta edición se presentará el próximo 19 de mayo.

Más información
⇒ Seguir en Twitter a @canvasRSC@Ilopeztriana,  @tinamonge y @CE4reputation

 

¿Te ha parecido interesante?

(+1 puntos, 1 votos)

Cargando...

Aviso Legal
Esta es la opinión de los internautas, no de diarioabierto.es
No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.
Su direcciónn de e-mail no será publicada ni usada con fines publicitarios.