La Asamblea General de Caja España-Duero ha aprobado por amplia mayoría, superior al 98 por ciento, la creación del Banco de Caja España de Inversiones, Salamanca y Soria S.A., al que se transferirán todos los activos de la Caja con la excepción de la Obra Social y el Monte de Piedad y la medida contingente de pedir ayuda al FROB.

El valor neto contable del nuevo Banco, según el balance individual de la Caja a 31 de diciembre de 2010, será de 1.515 millones de euros y su capital inicial será de 889 millones de euros, dividido en otras tantas acciones, informaron fuentes de la entidad, cuya Asamblea se reunió este lunes en León.

El nuevo Banco de Caja España de Inversiones, Salamanca y Soria asumirá y mantendrá la organización y los recursos humanos procedentes de la Caja, garantizando la estabilidad laboral de toda la plantilla.

Las mismas fuentes recordaron que el pasado lunes, 29 de agosto, se alcanzaba un acuerdo con el 100 por cien de la representación sindical para establecer un nuevo marco laboral en el Banco. El acuerdo prevé el mantenimiento de las principales condiciones laborales y beneficios sociales actuales de la plantilla de la entidad.

Una vez concluida la segregación, Caja España-Duero mantendrá la titularidad de las acciones del Banco y gestionará la Obra Social. Para ello continuará destinando la totalidad de sus excedentes que no se apliquen a reservas, a la dotación del fondo para la Obra Social con el fin de financiar proyectos que más se adecuen al cumplimiento de los fines fundacionales de la Caja.

Los clientes mantendrán con absoluta normalidad su relación financiera y de negocio con la nueva entidad, en los mismos términos que hasta ahora. El objetivo del nuevo Banco es incrementar la calidad de servicio y de productos y dando respuestas eficientes a todas sus necesidades, sin perder las tres señas de identidad que han caracterizado a nuestras Cajas y que son la proximidad al territorio y al cliente, la contribución al desarrollo económico y la lucha contra la exclusión financiera.