Por otra parte, la Generalitat dio luz verde a la propuesta de la “ventanilla única” y encarriló el proyecto de ley de estabilidad parlamentaria.

La resolución del Tribunal Superior de Justícia de Catalunya protagonizó buena parte de la rueda de prensa del consejo de gobierno de la Generalitat. La presentación de un recurso iba de oficio, así como la contundente defensa de la Generalitat –y de la mayoría de la sociedad catalana- para aplicar la inmersión lingüística “caiga quien caiga”, en palabras del portavoz Francesc Homs. Asimismo aseguró que tienen “razones democráticas, jurídicas y jurídicas muy sólidas” para que prospere el recurso que presentan.

Homs aprovechó la insistencia de las preguntas sobre el tema para asegurar que el Govern tiene un programa y está abierto a pactar con unos y con otros para lograr sacar adelante sus propuestas. Recitó los acuerdos que ha llegado con las diferentes fuerzas del Parlament para con la “geometría variable” sacar adelante su política. Se permitió asegurar que las críticas que reciben por sus pactos con el PP de los partidos de izquierda “se les ve el plumero, porque salen a criticar la política lingüística (que es un tesoro de todos) y a criticar al Govern, y esto es mezclar cosas que no tienen nada que ver”.

No se plantean que el PP pueda cambiar de actitud por su oposición a la política lingüística: “Nos sorprendería que para el PP la economía y el paro quede relegado porque su prioridad ahora fuera la lengua de los colegios. Ellos sabrán si el catalán en la escuela, que no es un problema real en la calle, es su gran prioridad”, Homs insistió que de cara a futuras negociaciones (entre ellas la de los Presupuestos del próximo año que los plantean con un nuevo recorte de alrededor del 5%) “no vetamos negociar con nadie, nosotros tenemos un programa y buscaremos los apoyos necesarios para tirarlos adelante”.

Ventanilla única

La polémica sobre el catalán dejó en segundo plano la decisión del Govern de dar luz verde a la implantación de la llamada “ventanilla única empresarial” para facilitar los trámites especialmente a los pequeños  y mediado empresarios y autónomos. Pretenden eliminar el 20% de los trámites administrativos y simplificar el 68%.

Explicó Homs que de los casi seiscientos trámites que un emprendedor puede realizar con la administración el 78% son competencia de la Generalitat, el 16% de la administración central y el 4% de la municipal. Con la propuesta de la ventanilla única pretenden ofrecer un servicio integral y de proximidad al empresario. Para ello de los 470 posibles trámites burocráticos que son competencia de la Generalitat pretenden eliminar 90, setenta de ellos totalmente y 17 parcialmente.

Ley de Estabilidad

Por otra parte el Govern aprobó la memoria de lo que será el proyecto de Ley de Estabilidad Presupuestaria propia que piensa enviarlo al Parlament la última semana de septiembre. El proyecto tiene una doble  finalidad: demostrar que la Generalitat puede ejercer la autonomía financiera en el contexto actual, contribuir al saneamiento y recuperación de las cuentas del sector público y asegurar la viabilidad del estado del bienestar. De esta manera el Govern se compromete a no gastar más de lo que se tiene, “algo que hasta ahora no han hecho otros gobiernos”.

Esta propuesta es una réplica a la decisión del Gobierno central de modificar la Constitución, y así lo constató Homs al asegurar que con este proyecto “se pone de manifiesto que nadie está en condiciones de darnos lecciones desde fuera”.