Las telecomunicaciones se han convalidado como un «sector vital» para la sociedad actual, la columna vertebral, pero que solo pueden cumplir con su papel «si disponen de las mejores redes», ha manifestado el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete en la junta de accionistas de la compañía celebrada este viernes. El máximo directivo del grupo se refería a los meses de la pandemía debida a la coronavirus en los que el teletrabajo y las telecomunicaciones han permitido mantener actividades esenciales. Una tendencia que ha mostrado que la digitalización es «imparable» y que el negocio de las telecomunicaciones es más resistible que otras actividades.

El presidente ejecutivo de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, durante la junta general de accionistas 2020

El comportamiento en Bolsa, que tanto preocupa a sus accionistas -institucionales o individuales-, ha formado una parte relevante de la intervención del presidente de Telefónica: «el precio de la acción se ha visto afectado; no somos inmunes a esta situación».

Otro bloque de su discurso ha estado protagonizado por el repaso a los objetivos fijados en noviembre, y el cumplimiento de parte de lo programado. Un plan que tiene como meta la transformación  del grupo en tres años en la operadora que reclama la demanda y la revolución tecnológica.

Entre las operaciones ya desarrolladas están las alianzas estratégicas de Telefónica Tech con Micfrosoft o Google y los pasos dados para la segregación de los negocios de ciberseguridad y cloud. Si bien la operación más relevante es el acuerdo con Liberty Global, que afecta a la filial O2 y que transforma el mercado británico. El último acuerdo alcanzado ha sido la venta de 10.000 torres de telecomunicaciones en Alemania a Telxius, su compañía de infraestructuras de telecomunicaciones, que servirá para reducir deuda.También se ha referido a la segregación de activos en América Latina.

La crisis no impide que la empresa mantenga las previsiones de pago de dividendo, Pallete ha manifestado ante la junta telemática que es posible porque el grupo cuenta con un fuerte posición de liquidez y con un sólido balance. Para 2020, un objetivo prioritario la optimización de la generación de caja.

Entre las propuestas aprobadas por la junta es el reparto del dividendo durante 2020, que se mantiene en 0,40 euros por acción, si bien se ha vuelto al scrip dividend (el pago de dividendo por medio de la entrega de acciones nuevas de la operadora) de forma voluntaria, de manera que el accionista puede cobrar en efectivo si así lo solicita. Para el segundo tramo de 2020, que se pagará en junio de 2021, no hay sistema de pago aún.