El Gobierno de China ha anticipado «medidas equivalentes» por las sanciones adoptadas por Estados Unidos contra cuatro dirigentes chinos por las presuntas violaciones de los Derechos Humanos en Xinjiang contra los uigures, una minoría étnica que habita mayoritariamente en esa región autónoma.

El portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Zhao Lijian, ha advertido de que Pekín también se reserva el derecho de actuar contra instituciones o individuos que hayan actuado «mal» en temas relacionados con Xinjiang. «Si Estados Unidos sigue actuando de forma arrogante, sin duda China contraatacará», ha advertido.

Entre los cuatro dirigentes sancionados el jueves por Washington destaca Chen Quanguo, miembro del Politburó del Partido Comunista de China (PCCh) y considerado el dirigente de mayor rango incluido hasta ahora en la ‘lista negra’ norteamericana. Se le considera el artífice de los programas de detención y vigilancia en Xinjiang.

El Departamento del Tesoro de Estados Unidos también ha señalado al Zhu Hailun, antiguo ‘número dos’ de Chen, así como al actual director del Buró de Seguridad Pública de Xinjiang (XPSB), Wang Mingshan, y a su antecesor Huo Liujun por las «tácticas represivas usadas al menos desde finales de 2016 por el XPSB contra uigures y miembros de otras minorías étnicas en la región, incluyendo detenciones y vigilancia masivas».