Durante el estado de alarma en España, activo del 14 de marzo al 21 de junio, el teletrabajo ha sido la fórmula más utilizada para mantener el nivel de actividad en los negocios.

Durante el confinamiento por la crisis del coronavirus, en el caso de los establecimientos comerciales, además del teletrabajo también se introdujeron, entre otras medidas, el servicio a domicilio y el comercio electrónico. Según el Indicador, alrededor de una tercera parte de los establecimientos que modificaron su funcionamiento adoptando el teletrabajo durante el estado de alarma prevé mantenerlo en el futuro. Por su parte, el 20,6% de los negocios que adoptaron el comercio electrónico desde el pasado marzo lo mantendrá, como mínimo, durante los próximos seis meses.