La empresa japonesa Canon, popularmente conocida por sus cámaras fotográficas, registró unas pérdidas netas atribuidas de 8.835 millones de yenes (71,6 millones de euros) en el segundo trimestre de 2020, frente a las ganancias netas de 34.519 millones de yenes (279,6 millones de euros) del mismo periodo del año anterior, según las cuentas trimestrales publicadas este martes por la compañía.

La facturación entre abril y junio experimentó un descenso del 25,7%, situándose en 673.315 millones de yenes (5.453 millones de euros). La división de equipamiento de oficina e impresoras cayó un 30,2%, hasta 307.547 millones de yenes (2.490 millones de euros), mientras que el área de dispositivos ópticos y cámaras fotográficas ingresó un 30,8% menos, hasta 141.674 millones de yenes (1.147,3 millones de euros).

La división de maquinaria industrial facturó 139.275 millones de yenes (1.128 millones de euros), un 22,4% menos, al tiempo que el segmento de dispositivos médicos se contrajo un 3,1%, hasta 101.852 millones de yenes (824,8 millones de euros).

Por áreas geográficas, los ingresos procedentes de Japón cayeron un 15,9%, hasta 177.293 millones de yenes (1.425,4 millones de euros), al tiempo que en el resto del mundo descendieron un 28,6%, hasta 496.002 millones de yenes (4.015,6 millones de euros).

En el trimestre, el coste de los productos vendidos descendió un 20,3%, hasta 398.000 millones de yenes (3.222,1 millones de euros), al tiempo que los gastos de venta, generales y administrativos se situaron en 229.348 millones de yenes (1.856,8 millones de euros), un 20,6% menos. La partida de investigación y desarrollo (I+D) fue de 63.722 millones de yenes (515,9 millones de euros), un 14,4% menos.